noviembre 8, 2010
Pertenecen a la asociación Blanco Perfil y compitieron en el 4º Torneo Patagónico de Torball, que se realizó el fin de semana en Luis Beltrán. El ministerio de Desarrollo Social contribuyó con el viaje.
Desde el ministerio de Desarrollo Social informaron que integrantes de la asociación de ciegos y disminuidos visuales “Blanco Perfil” participaron en el 4º Torneo Patagónico de Torball, que se desarrolló durante el fin de semana en la localidad rionegrina de Luis Beltrán. Obtuvieron el 1º puesto en la categoría masculina y el segundo lugar en la femenina.
También fueron distinguidos por su trayectoria deportiva María Rosario Barros, de 67 años, y Julián Mega, de 58. Luis Centeno, de San Patricio del Chañar, obtuvo el premio al “mejor jugador y goleador del torneo”.
La delegación estuvo conformada por dos equipos masculinos y uno femenino, en los que participan 12 personas con discapacidad visual provenientes de Neuquén capital, Plottier, San Patricio del Chañar, Vista Alegre, Plaza Huincul y Cutral Co, entre otras localidades.
Los deportistas fueron acompañados por el profesor y director técnico Gustavo Depine y la coordinadora Ana Graciela Díaz, que trabaja para la subsecretaría de Cultura y Deporte. El ministerio de Desarrollo Social colaboró con un vehículo y los gastos de traslado.
Por su parte, la presidenta de Blanco Perfil, Lorena Magaña, agradeció al ministerio por la colaboración que ofrece para el desarrollo de este tipo de actividades deportivas. Contó también que los integrantes del equipo entrenan los días martes, de 17.30 a 19, y los sábados, de 9.30 a 13.30, en el gimnasio de la escuela especial Nº 7 de la ciudad de Neuquén.
Qué es el torball
El torball o torbol es un deporte que se creó exclusivamente para personas ciegas o con deficiencias visuales. Juegan 3 jugadores por equipo, con una pelota sonora que tiene que ser arrojada con las manos por debajo de tres cuerdas que se encuentran a lo largo de la cancha. El objetivo es meter la pelota dentro del arco del adversario, que mide lo mismo que el ancho del campo de juego.
La disciplina se creó tras la Segunda Guerra Mundial, como parte de un programa de rehabilitación para veteranos no videntes, y se oficializó en 1976, cuando la incluyeron dentro de la Organización Nacional de Deportes para Minusválidos (ISOD).