El gobernador Jorge Sapag se mostró contrario “a crear -con el gas y el petróleo- una provincia de la especulación” y afirmó que “el bienestar general deberá imponerse por sobre cada uno de los intereses sectoriales para no perder esta oportunidad histórica que tiene Neuquén de desarrollarse”.
Al dejar inaugurada hoy la Experiencia Endeavor 2015 en Neuquén, el gobernador Jorge Sapag afirmó que “en este aquí y ahora, en nuestra tierra neuquina y en base a los emprendimientos que desarrollamos en los últimos tres años con la empresa YPF, nos pusimos a pensar en grande, con creatividad, pensando en el alto impacto, en tomar las mejores decisiones y en ser agentes del cambio”.
También recordó que “de la mano de la presidenta de la Nación se tomó la decisión en 2013 de poner en marcha el primer desarrollo no convencional del mundo fuera de América del Norte. Ese desarrollo se decidió hacer en Loma Campana, con una ley provincial que respaldó esta iniciativa con nuevos plazos y condiciones. Entonces, a partir de allí, con un alto grado de coraje, con una visión estratégica, incorporando nuevas tecnologías y sabiendo que el país necesitaba construir la soberanía hidrocarburífera, decidimos ser agentes del cambio y no resignarnos para no llegar a ser una República dependiente y de este modo dejar de gastar 40.000 millones de dólares en importación de energía”.
En este punto, Sapag subrayó que “hay que armonizar los intereses. No puede haber intereses sectoriales y particulares por encima del interés y bienestar general, para así hacer posible que la calidad de vida impere en una sociedad. Y para que el valor dignidad llegue a ser un valor realizable necesita de esta filosofía, es decir, de hacerlo posible y sustentable con reglas de juego claras, en donde el bienestar general se imponga por sobre cada uno de los intereses sectoriales”.
Sostuvo que “la puja de un grupo o individuo no puede venir a desbaratar la posibilidad histórica que tiene una provincia como Neuquén de desarrollar este recurso y colocar una bisagra en la historia de la Provincia y el país”.
Agregó que “al mismo tiempo debemos apuntar a la diversificación de la economía con energías alternativas, con el turismo, la agroindustria o la forestación por citar algunos aspectos relevantes. Por supuesto que para ello el Estado neuquino creará todos los fideicomisos y herramientas institucionales que son necesarias a partir del gas y del petróleo, para crear un fondo y atender su economía y hasta su caja de pensiones y jubilaciones”. Y dijo: “No podemos hacer de nuestra provincia y dentro de nuestro país una provincia rentística, sino que debe ser una provincia de producción; no de especulación sino de trabajo”.
La apertura de las charlas se concretó esta mañana en el salón Rainbow del Casino Magic de esta capital. Estuvo presente especialmente invitado el CEO de YPF, Miguel Gallucio, junto con destacados empresarios del país y de la región.
Galluccio dijo que “Neuquén con su desarrollo Vaca Muerta es un claro ejemplo de innovación y de crecimiento. Este emprendimiento que está aquí en Neuquén es el más importante que tiene la Argentina, por dimensión, por complejidad y proyección; es el más relevante que el país obtiene en los últimos 20 años y será fundamental para su futuro”.
Enfatizó que “en cuanto a la energía en la Argentina el foco debe estar en la eficiencia, y concretamente en cómo reducir los costos y producir más. En este contexto que hoy tenemos de gas y petróleo esto representa un problema pero por sobre todo una gran oportunidad de crecimiento, porque hablamos un negocio sustentable de por vida”.
“Soy un convencido que el futuro nuestro (argentino) pasa por producir lo nuestro, por lograr el autoabastecimiento” y de “transformar ese recursos que hoy poseemos en valor, y ese recurso está aquí en Neuquén. Esta provincia tiene en la actualidad una oportunidad histórica no solamente para los neuquinos sino para transformar el futuro de toda la Argentina”, dijo el presidente de YPF.
Más adelante Jorge Sapag aseguró que los “países que se precien de soberanos tienen que tener conocimiento, educación, trabajo, alimentos y energía, para así construir la soberanía” y reiteró sus felicitaciones “hacia esta iniciativa Endeavor porque en la región y en el país se necesitan miles y miles de emprendedores” para que “este cambio que inició Neuquén para todo el país sea realmente grande y para poder cumplir con la premisa que el desarrollo sustentable en lo económico vaya de la mano de la sustentabilidad social y ambiental”.
Indicó que “lo social es fundamental en este tipo de desarrollo y crecimiento como el que experimenta Neuquén, porque es imprescindible adoptar valores compartidos y saber que el impacto debe ser productivo, con un efecto multiplicador, siempre en un contexto económico favorable y en donde todos los sectores ganen: los trabajadores, las empresas, los productores, las empresas de servicios. Tienen que ganar renta el Estado nacional y el provincial mediante los impuestos y regalías”.
“Y en este ganar-ganar hay que pensar en grande pero también en lo que es posible y realizable y, al mismo tiempo, se deben respetar las reglas de juego, ya que la sustentabilidad requiere estabilidad y estas deben ser garantías para todos, para la sociedad, para los inversores, los productores y las empresas que trabajan. Estas reglas de juego deben ser pocas normas pero que se cumplan y no muchas, porque no se conocen y no se cumplen”, reafirmó el mandatario.
El gobernador ponderó la apertura de una oficina Endeavor en la ciudad de Neuquén con alcance a toda la región “por ser la primera de la Patagonia de las cinco con que cuenta esta organización en el país” y por lo cual “para nosotros es motivo de orgullo y alegría”.
También agradeció la presencia de Miguel Galluccio porque representa a una empresa argentina como YPF que “es emblemática en la república, fue y es columna vertebral de la Patagonia, es fundadora de pueblos y empresas, con una alta responsabilidad actual en el desafío que tenemos como país y como provincia”. Para cerrar, Sapag ratificó que “Neuquén y el país tienen la obligación de convertirnos en ejecutores natos de las grandes ideas y proyectos, de una Argentina que tiene un porvenir extraordinario”.