Las Ovejas ofició como anfitriona de un encuentro en el que participaron investigadores, gestores culturales, docentes, colectivos y portadores de su propio patrimonio cultural inmaterial pertenecientes a diversas instituciones y actores sociales. Bajo la incansable labor de las promotoras culturales se reunieron interesados en debatir la historia y la riqueza cultural del norte neuquino, pertenecientes a la Universidad Nacional del Comahue (UNCo), el Centro de Formación Profesional N° 18, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria y el ministerio de las Culturas.
En las intensas jornadas de intercambio de experiencias y saberes se discutió la importancia del arte rupestre de la región y su fuerte vinculación identitaria para las comunidades, se repasó y homenajeó la obra y legado del investigador Héctor Alegría y Carlos Procopiuk, figura pionera del cine documental patagónico. También se revisaron diversas aristas del universo de los crianceros trashumantes desde la perspectiva productiva, cultural y medioambiental, los avances y desafíos en torno a productores campesinos que son cruciales para el patrimonio cultural neuquino.
En la segunda jornada de trabajo se continuó con la enriquecedora sesión de mesas de debate donde se abordó la importancia cultural de la cocina y la comida crucial del norte neuquino, como aquel espacio antropológicamente denso donde se anuda la historia y la identidad en torno a la mesa y, por último, se compartió la mesa de las Cantoras Campesinas del norte neuquino en la cual hubo emotivos momentos de análisis, aprovechando la ocasión para entregar el álbum “Trilogía de las Cantoras Campesinas” realizado en conjunto con el Inamu, exponiendo los resultados de mayor relevancia de una expresión del PCI neuquino, que es uno de los icónicos emblemas de las políticas públicas culturales desarrolladas por el ministerio de las Culturas.
Los resultados de este primer encuentro de patrimonio cultural se constituyeron en una auspiciosa iniciativa que tiene como horizonte la federalización del quehacer cultural y la proliferación de iniciativas de reflexión académica y comunitaria, que permiten una mayor comprensión y valoración de nuestro acervo histórico y cultural.
A través de enriquecedores debates se llegó a la conclusión sobre la importancia de continuar con iniciativas que, dada la gran concurrencia de participantes, demuestran el interés de la ciudadanía en preservar activamente el patrimonio vivo de la región, “su” historia y cultura.
