agosto 5, 2009
El acto de apertura de sobres se desarrolló este miércoles al mediodía en el espacio Duam. El titular de la ADI, Pedro Salvatori, señaló que el pozo geotérmico neuquino cuenta con condiciones excepcionales para el desarrollo de este tipo de fuentes de energía.
Con la presentación de dos empresas interesadas, se desarrolló este miércoles al mediodía la apertura de sobres de la convocatoria pública de inversores – llamado a manifestación de interés para la construcción del proyecto geotérmico Copahue, una planta de generación de 30 megavatios de potencia (MW) que demandará una inversión de más de 60 millones de dólares.
Pampa Energía SA y Grupo Minero Aconcagua SA Andean Geothermal Corporation fueron las firmas que se presentaron a la convocatoria realizada por el gobierno provincial, en tanto que Benito Roggio e hijos SA -que en principio había adquirido el pliego licitatorio- se excusó de participar.
El acto se desarrolló en el Espacio Duam con la presencia del presidente de la Agencia para la Promoción y Desarrollo de Inversiones del Neuquén (ADI), Pedro Salvatori; el titular de la subsecretaría del Copade, Claudio Garretón, y otros funcionarios.
Salvatori aseguró que el hecho de que se esté avanzando en el proyecto “es un motivo de satisfacción y orgullo”. “Es un viejo objetivo y un anhelo del pueblo del Neuquén poner en valor todo el potencial de los recursos naturales que encajan en este clima moderno de energías no contaminantes, inagotables, para los cuales Neuquén y la región Patagónica son emblemáticas”, dijo.
Además destacó el apoyo del titular de la cartera nacional de minería, Jorge Mayoral, que estuvo presente en el lugar para participar, más tarde, de la firma de un acuerdo para la aplicación en la provincia del programa de gestión ambiental minera (Geamin).
“Con el secretario de Minería de la Nación, cuando estuve en el Senado, pudimos trabajar hombro a hombro con este proyecto, y fuimos juntos a la Cámara de Diputados y lo resolvimos con una resolución de la Secretaría de Minería, la 59 del año 2005, en la cual se le otorgan los beneficios de la ley de promoción minera nacional a la etapa minera de la extracción del recurso geotérmico”, explicó Salvatori.
El pozo geotérmico es un reservorio de la naturaleza que recibe fuente de agua a alta temperatura y lo transforma en vapor. La calidad y cantidad del vapor “es un dato fundamental para encarar un proyecto como éste”, que está calificado “de excelencia porque prácticamente las instalaciones no van a requerir inyección de agua, ya que el vapor es sobresaturado, seco y el ideal para este tipo de emprendimientos”, indicó el titular de la ADI.
El proyecto abarca la reactivación del Centro Regional de Geotermia del Neuquén (CREGEN) y la creación de un complejo geotérmico integral en Copahue que incluya una planta de generación de 30 megavatios de potencia (MW), calefacción geotérmica del complejo hotelero local y aprovechamiento integral del campo.
Antecedentes
En noviembre pasado, mediante una petición ante la autoridad minera de primera instancia provincial, la ADI obtuvo los derechos de explotación minera de los vapores endógenos de Copahue, lo que permitió que la provincia pueda llevar adelante el proyecto de desarrollo del campo geotérmico de Copahue y la construcción de la planta de generación de energía eléctrica.
Los vapores endógenos son considerados en el código de minería como minerales de primera categoría, por lo cual, de no mediar la petición de la ADI, los derechos de concesión podrían haber sido peticionados por cualquier persona física o jurídica, con lo cual la provincia -descubridora del recurso desde 1981- habría perdido todo lo invertido hasta el presente (una suma no inferior a los 15 millones de dólares).
Este monto incluye todos los gastos de exploración realizados desde 1973, la formación de sus recursos humanos y la construcción de la central piloto (primera en Sudamérica) puesta en servicio en 1988, durante el gobierno de Salvatori.
Además, de haber perdido la provincia estos derechos también habría perdido la oportunidad de obtener a través del mecanismo de desarrollo limpio del protocolo de Kyoto (MDL) los certificados de carbono o bonos verdes de este proyecto, cuyo valor aproximado para un módulo de generación de 30 MW alcanza los 50 millones de dólares.
Entre 1988 y 1991 la provincia firmó con la agencia de cooperación japonesa JICA un acuerdo que concluyó en un estudio de factibilidad técnico económico que asegura la disponibilidad del recurso para construir dicha planta, sin afectar el medio ambiente.
La geotermia está considerada internacionalmente como una de las fuentes renovables de energía ambientalmente limpia. Su desarrollo comenzó en Larderello, Italia, en 1904, y se extendió a muchos otros países tales como México, Indonesia, Japón, USA y Costa Rica, entre otros, totalizando una potencia instalada de unos 10.000 MW, es decir el equivalente a 10 veces la potencia de Alicurá.
Las cualidades de Copahue y su grado de desarrollo han sido destacadas por grupos de inversores nacionales, estadounidenses y europeos que se interesaron en su explotación a partir de las bondades del recurso, el bajo riesgo minero y la factibilidad de despachar, a través del sistema eléctrico del EPEN, la energía que se produzca.
Datos técnicos del campo termal Copahue
El campo termal se localiza a los 37° 50′ de latitud sur y a 71° 05′ de longitud oeste en la provincia de Neuquén, sobre el margen este de la Cordillera de los Andes, en el limite internacional con Chile.
Es el proyecto más avanzado en la Argentina, y se encuentra en la etapa de desarrollo. El campo termal se localiza en el extremo occidental de una megacaldera de 15 kilómetros por 20 kilómetros de diámetro, en cuyo limite oeste se ubica el volcán Copahue de 2.977 metros de edad Cuaternaria.
El volcán corresponde al último episodio del complejo efusivo Copahue-Caviahue que inició su actividad durante el Plioceno y que se extendió hasta el Cuaternario. Los materiales volcánicos comprenden un mayor porcentaje de lavas que de piroclasticas y en su composición predominan los basaltos, basandesitas y andesitas de la secuencia magmática calcoalcalina y en reducida cantidad latitas de la serie magmática shoshonítica.
Dentro del área termal de 1,2 kilómetros cuadrados se delimitó el área de mayor interés geotérmico con alternativas de explotación económica, zona hipertérmica, en las que se realizaron tres pozos de exploración (COP-1: 1.414 metros, COP-2: 1.241 metros y COP-3: 1.065 metros) que atravesaron niveles rocosos figurados que almacenan una mezcla de agua-vapor dominante a 230° C y con una productividad mediana.
En función del modelo geotérmico se entiende que corresponden a reservorios secundarios ubicados en niveles superiores, quedando por comprobar la existencia del reservorio principal que, se estima, se encontraría ubicado a una profundidad de 1800 metros.
En el campo geotérmico Copahue fue puesta en funcionamiento en abril de 1988, una central geotermoeléctrica piloto. Funciona mediante un ciclo binario utilizando isopentano como fluido de trabajo intermedio. La planta es portátil y fácilmente desmontable. Esta emplazada a 2000 metros sobre el nivel del mar sobre la boca del pozo productor de vapor (vapor seco, 8% de gases icondensable), ubicado a 2 kilómetros de la localidad de Copahue.