“Es muy grato el estar aquí reunidos para este evento. Me siento muy conmovido por este nuevo aniversario de la Policía de la Provincia del Neuquén.
Señora vicegobernadora Ana Pechen; señor Fiscal General de Neuquén, José Gerez; señor Cónsul General de Chile en Neuquén, Roberto Cordero Pinilla Consejero; señores subjefes de las Policías hermanas de las Provincias de La Pampa y de Río Negro; a todos los integrantes del Poder Ejecutivo provincial; del Poder Legislativo; del Poder Judicial; a todos los integrantes de la Policía de Neuquén; tanto personal policial como el que trabaja en tareas administrativas, el que está en estado de retiro; a los familiares, al padre Juan Carlos; al diácono (capitán retirado) Rodolfo Forquera; a Santiago Polito Belmonte, un saludo en el Día del Profesor Neuquino, y a todos los presentes.
Es para mí -como decía antes- motivo de alta satisfacción, de orgullo y que sale de lo más profundo de mi corazón, en nombre del gobierno de la provincia del Neuquén, en nombre del pueblo de la provincia, celebrar este nuevo aniversario de la Policía; y celebrarlo con reconocimiento y agradecimiento a la tarea cotidiana que, en función del servicio que se presta en defensa de altos valores y de derechos fundamentales como la vida, la integridad física, la seguridad, la libertad, presta cada día el hombre y la mujer que conforma esta institución de la provincia de Neuquén.
En estas palabras finales de este acto quiero señalar que la Policía de la provincia de Neuquén tiene una historia paralela, conjunta y simultánea con la misma historia de la provincia. Desde sus orígenes como Territorio Nacional fue evolucionando exactamente de la misma manera que la sociedad neuquina y que el Estado provincial. Esto no es casualidad, porque la Policía es una institución fundamental de la organización de la sociedad civil y de la organización del Estado.
La Policía es aquella institución a la cual la sociedad civil le delega en forma única y exclusiva el ejercicio de la fuerza pública, el cumplimiento de la Constitución y de las leyes, en defensa de estos derechos y valores fundamentales. La Policía de la provincia de Neuquén está presente en cada día de la historia de la provincia y sus hombres y mujeres trabajan de día y de noche, de lunes a viernes, sábados, domingos y feriados también. Es un caso muy particular. Es una actividad -como decía muy bien el jefe de la Policía, el comisario general Raúl Laserna- es un servicio y es una vocación; es un compromiso y es una responsabilidad.
En esa tarea con compromiso, con vocación y con responsabilidad tenemos que, en este día, celebrarlo, reconocerlo y ponerlo en su exacto valor y en su verdadera dimensión. La institución policial conforma este brazo del Estado que es el que los Tres Poderes del Estado confían para el cumplimiento de las leyes. Están presentes los tres Poderes del Estado, el Poder Legislativo con la sanción de leyes adecuadas -que quiero hacer un especial reconocimiento a una Legislatura que en 5 años trabajó en la modernización de las leyes; un especial reconocimiento al Poder Judicial, articulando acciones con la Policía de la provincia como un auxiliar de las tareas que tiene que desarrollar el Poder Judicial. Y el Poder Ejecutivo estando presente, tanto en obras de infraestructura, en equipamiento, en capacitación, en incorporación de recursos humanos, en una tarea constante y dinámica.
En una tarea constante que, como hoy, significó premiar a aquellos que se destacan por sus valores, valentía, responsabilidad y vocación de servicio y, al mismo tiempo, un Estado que tiene que estar presente en una tarea conjunta con la institución policial para que aquellos integrantes de la Fuerza que no están a la altura de la institución queden de lado.
Es así esta tarea permanente y cotidiana. Es un tarea donde no se reconoce, como decíamos antes, días de la semana; en la que se trabaja en todos los ámbitos de la provincia; en la tierra o en el agua; se trabaja en los incendios y en los estragos; se trabaja en un evento de un volcán como en un incendio, y también por supuesto en esa tarea primordial para la vida ciudadana que es la prevención y la persecución del delito.
Es por todos estos motivos que este día es un día de festejo. Los neuquinos tenemos que festejar la existencia de una institución fuerte, una institución que se tiene que dinamizar permanentemente, profesionalizarse permanentemente; incorporando tecnologías, incorporando y gestionando más eficiencia, trabajando y velando por la seguridad de cada uno de sus hombres y mujeres, y trabajando por la seguridad de cada una de las familias de la provincia.
El jefe de la Policía detalló acabadamente -junto al ministro Gabriel Gastaminza- cada una de las acciones de gobierno hechas en los últimos 16 meses de gestión; todo lo que significó la implementación de un nuevo Plan de Seguridad de Cuadrículas, todo lo que significa incorporar equipamiento, vehículos, capacitación, hombres y mujeres; hombres que trabajan en la prevención y hombres que también trabajan en el Servicio Penitenciario Provincial con la jerarquía y la dignidad que indicó el jefe de la Policía. El cuidado de los internos es una tarea tan noble como velar por la seguridad de los ciudadanos, y en esta tarea tenemos que estar todos involucrados.
En este día de la Policía no puedo sino agradecerle y reconocerles a todos los familiares y seres queridos, de hombres y mujeres de esta institución. Quiero también decirles a todos los ciudadanos neuquinos que tenemos que trabajar en una seguridad donde todos tenemos que estar comprometidos. Sin seguridad no hay libertad y sin seguridad no hay ninguna posibilidad de tener los derechos que requiere la sociedad.
Una sociedad que tiene que velar por el cumplimiento del contrato social, de la Constitución y de las leyes, donde nadie tiene que hacer justicia por mano propia, ni los integrantes de la institución policial, ni tampoco los miembros de la sociedad civil. Desde esta tribuna en este día de la Policía convoco a todos los dirigentes sindicales y políticos, a todos los funcionarios, a todos aquellos que cumplen alguna misión función delegada por el voto soberano del pueblo, a que trabajemos dentro de ese contrato social.
Cortar rutas o tomar escuelas, o convertir alumnos en rehenes de reclamos sectoriales no son actitudes democráticas. Nosotros como gobierno vamos a velar para que la Constitución tenga vigencia. No pueden algunos arrogarse la voluntad del pueblo. La Constitución es clara: el pueblo gobierna y delibera a través de sus representantes, para eso existe la democracia electiva y representativa. Nadie tiene derecho a ir a cortar una ruta y cercenas los derechos de los demás ciudadanos.
Nadie tiene derecho a desconocer la tarea que se hace desde el Estado para cumplir con todas las obligaciones; nadie tiene derecho a cortar una ruta, a apropiarse del presupuesto provincial en beneficio de un sector o de una persona. Nadie tiene derecho en esta sociedad a arrogarse el ejercicio de la violencia. Para eso tenemos un contrato social, para eso existe la democracia, para eso el uso de la fuerza pública lo hemos delegado en el Estado y el Estado en la institución policial debidamente acreditado, controlado y contenido por el Poder Judicial.
Es por eso que insisto desde esta tribuna de convocar a todos los ciudadanos de la provincia a la construcción de la paz y de la justicia. No se construye paz y justicia haciendo justicia por mano propia; no se construye paz y justicia echándole la culpa de lo que pasa a los demás. Que cada uno se haga cargo de sus responsabilidades y funciones. El gobierno provincial está presente en cada acción, en cada municipio, en cada comisión de fomento, en cada institución del Estado. Pero hay funcionarios que le echan la culpa a los demás de responsabilidades propias.
Cuando se habla de obras o de acciones que hay que hacer en la provincia hay que recorrerla y andarla. Si alguien quiere hablar de Chihuido I que vaya primero a conocer primero el lugar donde se va a levantar la represa; si alguien quiere hablar de Vale Do Río Doce que sepa para qué sirve el potasio; si alguien quiere hablar en la sociedad neuquina de agua, de purificación de los efluentes; trabajos y obras públicas que busquen y gestionen los recursos como lo hemos hecho permanentemente desde la provincia.
Hemos hecho Reformas Fiscales, hemos convenido con las empresas concesionarias de gas y del petróleo nuevas obligaciones y nuevos pagos. Eso representa más de 2 mil millones de pesos anuales en el presupuesto del 2013. Esos ingresos extraordinarios anuales los ha procurado el gobierno provincial para que todos los municipios trabajen en armonía y que trabajen con responsabilidad haciéndose cargo cada uno de sus funciones y de sus misiones. Que no les quepa dudas que vamos a estar colaborando con todos y cada uno de los municipios como lo hacemos hoy con Plottier, o como lo hemos hecho con Senillosa, donde la provincia asiste con más del 90 por ciento de los recursos; o también con la colaboración que le dimos a todos los municipios para el pago de los aguinaldos (en julio).
Pero no se nos puede exigir a la provincia más de lo que la provincia puede dar. Los recursos económicos no son propiedad de un sindicato o de una persona, los recursos del presupuesto son los recursos del pueblo. Nosotros somos simples administradores y como administradores no vamos a ser extorsionados por aquellos que quieran hacer justicia por mano propio.
Es por eso que en este día de la Policía convoco a todos los neuquinos sin excepción: a los ciudadanos que ejercen diariamente su actividad cotidiana en la vida privada y a los ciudadanos que tienen responsabilidades públicas, a que tomemos cada uno nuestra responsabilidad en la sociedad para construir una sociedad justa, pacífica, respetuosa y pluralista pero, que reconozca este principio fundacional representativo de una democracia electiva y representativa, donde el pueblo delibera y gobierna a través de sus representantes; y no de unos pocos que gritan, patalean o se hacen los violentos cortando una ruta o expresándose en forma violenta en el sector que sea.
En este día de la Policía de la provincia de Neuquén, quiero arrancar desde lo más profundo de mi ser, un presente muy sentido por todos los hombres y mujeres que han entregado su vida por la provincia y por los derechos de sus ciudadanos, en particular y en presencia de la familia de José Eduardo Aigo, pronuncio un presente emocionado hacia una persona que fue salvaje y cobardemente asesinada, y les aseguro que no vamos a aflojar en la búsqueda de los responsables y de los culpables hasta verlos encarcelados.
Pero también un presente profundo por todos los hombres y mujeres que entregan y han entregado su vida, su sacrificio, su trabajo cotidiano, por construir esta sociedad segura y más justa que todos nos merecemos. Que este cierre de acto y este aplauso que ustedes van ahora a proclamar, que sea pues un aplauso para la Policía de la provincia de Neuquén. Muchísimas gracias.