Crearán un departamento de Víctimas Especiales en la Policía

Crearán un departamento de Víctimas Especiales en la Policía

marzo 5, 2009

Intervendrá en casos de denuncias de delitos contra la integridad sexual y atención a víctimas de violencia familiar. El ministro Pérez recibió esta mañana a la agrupación “Las Juanas”. 

Con motivo de conmemorarse el Día Internacional de la Mujer, el ministro de Justicia, Trabajo y Seguridad, Omar Pérez, recibió esta mañana a la agrupación “Las Juanas”, con el objetivo de coordinar un abordaje integral e interdisciplinario de la temática de violencia de género y familiar.

En el encuentro, el ministro Pérez anunció la creación del departamento que se ocupará de la investigación, centralización de datos y especial tratamiento de dicha figura penal para brindar un trato profesional a la víctima, que debe someterse a procedimientos que atentan contra su pudor e intimidad, su dignidad y vida privada, lo que desalienta la radicación de la denuncia pertinente.

“Este departamento resulta necesario porque la víctima en la mayoría de los casos, a quien primero recurre, es a una dependencia policial”, explicó Pérez. Por ello, agregó, se debe garantizar la seguridad física y psíquica, y los elementos de prueba que faciliten el esclarecimiento del hecho y la aprehensión del autor.

“Una víctima necesita tiempo, solidaridad, protección e información sobre sus derechos, instrucciones en lenguaje claro y directo y ponerse en contacto con personas que conozcan acabadamente la temática de la violencia”, manifestó expresó el ministro.

Indicó que “en muchos casos las victimas se resisten a realizar la denuncia y retoman la convivencia con el agresor. Las razones por las cuales una victima adopta estas conductas son el temor a que el agresor cumpla las amenazas inferidas, creer en sus promesas de cambio y el temor al qué dirán”.

Cada departamento deberá contar para el cumplimiento de sus fines con un equipo interdisciplinario integrado por un psicólogo, un asistente social y un médico con especialización en el tema. Se creará un departamento en cada dirección de Seguridad, por lo que en principio habrá en Neuquén, Cutral Co, Zapala, Chos Malal y Junín de los Andes.

El departamento deberá trabajar en coordinación con el Centro de Atención a la Víctima del Delito, los consejos de la Niñez y la Adolescencia, el Consejo Provincial de las Mujeres y organismos gubernamentales y no gubernamentales.

De la reunión de trabajo de hoy participaron la subsecretaria de Promoción Social, Raquel Petris; el subsecretario de Justicia, Matías Gutiérrez Othaz; la presidenta del Consejo Provincial de las Mujeres, Azucena Olmos; la directora de Violencia de Género y Violencia Familiar de la municipalidad de Neuquén, Valeria Amnstein; la diputada provincial por Alternativa Neuquina, Paula Sánchez; la concejal por el UNE Mercedes Lamarca; el subcomisario, Alejandro Delgado; y la directora del Centro de Atención a la Víctima de Delito, Marisa Lazaretti.

Manual y protocolo

En noviembre pasado se presentó un manual y protocolo de actuación policial para el abordaje de la violencia familiar desarrollado por el ministerio de Justicia, Trabajo y Seguridad y el ministerio de Desarrollo Social a través del Consejo Provincial de las Mujeres.

En el manual se establecieron pautas de atención de situaciones de violencia, acerca de cómo recibir a una victima, qué información se debe brindar, cómo tratar al agresor y acerca de la derivación interinstitucional.

Según el documento, la cuestión básica a tener en cuenta cuando se presenta una situación de esta índole es que la conducta violenta es una modalidad de comportamiento inaceptable y constituye delito. Los varones y mujeres deben tener cuidado al atender una situación de violencia con sus propios estereotipos; no se puede ser neutral; las víctimas deben ser tratadas como personas individuales en riesgo; y en todos los casos es importante ponerse en el lugar de la otra persona.

El objetivo es atender a la víctima con interés y comprensión para lograr comunicarse con ella, observar el contacto verbal y no verbal, evitar las frases hechas y orientar la conversación al foco de la cuestión. Si se busca conectar empáticamente con la persona no se debe dar consejos ni tratar de animarla, zanjar la cuestión o compadecerla.