Tras seis meses de desarrollo, el torneo “Todos por la Recuperación” cerró su primera edición el último sábado en el Complejo Neuquén Rugby Club. El instituto de rehabilitación Arroyito se consagró campeón de la liga, mientras que Proyecto EVA obtuvo el segundo lugar.
El ministerio de Ciudadanía de la provincia, a través de la subsecretaría de Ciudades Saludables y Prevención de Consumos Problemáticos, acompañó el desarrollo de la liga a través de la constitución de la Mesa de Centros de Tratamiento de Adicciones. Para este año, la intención es replicar la experiencia y sumar más instituciones a la competencia deportiva.
“Esta es una problemática social que debe ser abordada desde una perspectiva intersectorial y uno de los ejes estratégicos es el trabajo con los centros de tratamiento, públicos y privados”, explicó el subsecretario de Ciudades Saludables y Prevención de Consumos Problemáticos, Hernán Ingelmo. “La Liga fue una iniciativa de los propios centros, y para nosotros ha sido una herramienta interesante para ahondar en cuestiones más profundas como el trabajo de los modelos terapéuticos, la inclusión socio-laboral y el acompañamiento de toda la comunidad en ese proceso”, agregó.
La Liga, que reunió a las comunidades de Arroyito, ASER, Persistir, Transitar, Casa del Sur y Proyecto EVA, se disputó desde el mes de agosto en las sedes de los centros de tratamiento, el último sábado de cada mes. Además de los encuentros deportivos, se promovió un espacio de esparcimiento e integración entre los usuarios y sus familias. “La liga permitió el encuentro de los chicos con otro par que está en recuperación, y fue una motivación permanente todas las semanas preparar el partido”, sostuvo Norma Bernardi, coordinadora del instituto de rehabilitación Arroyito, “nosotros somos un centro público y fue bueno tener la oportunidad de compartir con otros centros privados, en ese ir y venir entre privado y público, que muchas veces nos vemos como distantes y la realidad es que estamos todos comprometidos con la lucha contra la problemática”, agregó.
“Que los chicos puedan ver que hay otros chicos en la misma situación que ellos, peleándola igual que ellos, eso es uno de los puntos más valiosos de esta experiencia”, afirmó Jorge Pérez, referente del centro de rehabilitación Persistir de Plaza Huincul. “La Liga también es un espacio que los ayuda a trabajar el respeto a los límites y las pautas el compañerismo. Además nos permite visibilizar que existen lugares donde las personas con problemas de consumo pueden recibir contención y ver que se puede salir de eso, porque muchos otros han podido”, concluyó.