Con el objetivo de encontrarse en una muestra del producto anual para compartir con familias y comunidad una tarde llena de música, se realizó ayer un concierto de cierre de año del Programa Coros y Orquestas, organizado por los CPEM Nº 69 y 48. Las actividades se desarrollaron en el CPEM Nº 48 de Neuquén a partir de las 19, aunque desde temprano los miembros de las agrupaciones trabajaron en la organización del concierto.
Abrió la jornada el coro “Voces del Cielo” del CPEM Nº 67 de Centenario, dirigido por Mirta Trillo; luego se presentó el CPEM Nº 48, dirigido por Julián García; y cerró el momento de los coros “Guardianes del Oeste”, de la Escuela Nuestra Señora de la Guarda de Neuquén capital y el CPEM 27 de Plottier, dirigido por Carina Vega.
Luego llegó el turno de la “Orquesta de la Confluencia”. Se trata del ensamble de la orquesta del CPEM Nº 18 y el CPEM Nº 69, dirigida por Andrea Pulgar y Andrea Fernández, quien participa en este momento de una beca de formación musical en Italia.
Para coronar la jornada, todos los participantes desarrollaron obras en conjunto, sorprendiendo a los asistentes por el gran número de intérpretes cantando y tocando al unísono. En la obra final se interpretó una singular pieza aprendida en el encuentro nacional 2015 del Programa Coros y Orquestas del país, sobre la base de una percusión realizada con sus cuerpos y el de los asistentes que se sumaron a este diálogo musical.
La ministra de Educación, Cristina Storioni celebró la iniciativa del encuentro que permite otra forma de expresión para los jóvenes desde la participación en el arte. En este sentido, expresó que “con el Programa Coros y Orquestas los chicos desarrollan sus habilidades, adquieren nuevos saberes y comparten con sus pares en la escuela desde nuevas experiencias, aportando opciones a la hora de finalizar los trayectos educativos”.
Cabe destacar que dos egresadas del CPEM 69 seguirán participando de las actividades de la orquesta y una de ellas continuará sus estudios en la Escuela Superior de Música de Neuquén.
Las agrupaciones comenzaron con sus actividades como parte del programa Coros y Orquestas Infantojuveniles para el Bicentenario en 2009 para mejorar el acceso de los niños, niñas y jóvenes a los bienes y servicios culturales, colaborar con la retención escolar, estimular el contacto con la música y tender puentes hacia la reinserción de los jóvenes en la escuela desde el arte.