Discurso del gobernador Jorge Sapag con motivo del centenario de la Escuela Nº 36 de Covunco.

Señora directora de la Escuela, mi amiga Maris, a personal docente, a personal no docente de la Escuela, a los alumnos, Señor intendente de Mariano Moreno, Señor Jefe del RIM 10, Señor Jefe del RIM 21, Señores funcionarios provinciales, Señores Concejales, vecinos, vecinas, familiares, ex directores, ex maestros, ex alumnos de esta Escuela, vecinos y vecinas de toda la provincia. Cuántos sentimientos entrecruzados en este momento, cuántas evocaciones, cuántos recuerdos de todos. Celebrar 100 años de una Escuela es un evento histórico, es un acontecimiento para recordar y cuando lo recordamos estamos agradeciendo a todos aquellos que fueron precursores, pioneros, pioneros en la educación en tiempos tan difíciles. Cuando hablamos de 1908, de cien años, tenemos que pensar y transportarnos en el tiempo, imaginar un territorio nacional en las más inmensas de las soledades con distancias enormes, con silencios muy profundos, olvidados de los gobiernos nacionales en épocas duras, donde además en las adversidades de esas lejanías estaba también la contrariedad del clima, el frío la falta de recursos, la falta de medios. Evocar ese pasado significa pensar en esa primera escuela, en ese primer edificio, seguramente de adobe, sin chapas de cinc, porque recién en 1925 el segundo edificio a dos mil metros y ya de este lado del departamento Zapala pudo contar con dos aulas con techo de cinc. En el año 1936, creo que es un año emblemático, un año importante, en manos del Ejército y del ministerio de Guerra se construyó este edificio, en la fisonomía y en el aspecto que hoy tiene, con agua corriente, con luz, con gas, realmente una obra precursora siendo vecino del RIM 10, un regimiento que tiene una historia gloriosa y que nos honra de haber custodiado la Casa de Tucumán el día en que se declaró nuestra independencia. En nuestra evocación del pasado está toda la familia de Don Valentín Gallardo, algunos de ellos los conozco, algunos los he visto hoy y buscando y rastreando entre la documentación de esa época de ese año 1936 cuando se jubiló don Valentín me voy a permitir leerles un párrafo o mejor dicho un texto del diario La Verdad de Zapala que era un periódico independiente que defendía ya los intereses del territorio de Neuquén, el director Carlos Cechich en 1936 publica el siguiente artículo: “Valentín Gallardo, después de más de treinta años de servicio en las Escuelas del territorio ha obtenido los beneficios de la jubilación, el antiguo y prestigioso educacionista Valentín Gallardo, que no tenga una idea de lo que significaba hace treinta años llegar a Neuquén en misión netamente civilizadora como llegaron los maestros de entonces, no puede formarse un concepto del sacrificio moral y material que se imponían los jóvenes entre los que estuvo en primera fila Valentín Gallardo, abriendo caminos, levantando viviendas improvisadas y fabricando pupitres de adobe.Esos viejos maestros de la cordillera enarbolaron la enseñanza patria en medio de la indiferencia y el desamparo. Solos, frente a esa naturaleza que encontró para sus iras en la escuelita humana fortaleza de maestros, de varones y de mujeres.

Un día el señor inspector también dijo que los sinsabores y la mezquindad humana empañarían a cada paso la sinceridad y la nobleza de esos muchachos que, al mando de este lejano oeste, para que precedieran con el libro la incorporación de estas regiones a la Argentina civilizada.

Y Valentín Gallardo, que no había escapado a la ley natural de la deserción y la amargura, puede hoy contemplar, en 1936, la ruta de seis lustros con la satisfacción de la tarea cumplida, demanda realizada, y el gesto cordial de sus amigos de siempre.

A los que sabemos que hay un deber de gratitud con los iniciadores de la obra educacional en Neuquén, nada nos es más grato que hacer llegar en esta hora a Gallardo nuestro reconocimiento sincero y afectuoso saludo.´

Yo quiero sumarme a este homenaje del diario La Verdad, de Zapala. Y, en la persona de Valentín Gallardo, rendirles un homenaje a todos esos luchadores y pioneros. Rendirles un homenaje a todos los luchadores y trabajadores y maestros de hoy, al personal no docente de hoy de todas las escuelas, a la comunidad educativa. Rendirles un homenaje a todos aquellos que trabajaron como lo hizo el portero al que evocábamos hoy con la familia Funes.

Como la evocación del director de escuela. Como la evocación de Viviana Rivas, como ex alumna, y de Juan Zamudio, como ex director. Evocar a docentes, como la señora de Chan, a quien me parece todavía hoy verla en la escuela de Zapala dando sus clases; con su entrega, su compromiso y su amor a los chicos. Vecinos nuestros, como recordábamos recién, o la señora de Arias. Verte sentada hoy a vos es evocarla también a tu madre. O verlos también a maestros como Atos Pugliese, que con sus jóvenes 19 años, a sus 60 años, también fue maestro de esta escuela y está aquí presente.

O evocar el entusiasmo, el compromiso y la vocación -como decía hoy Zamudio- de todos los docentes cuando encaran esa noble tarea de la educación de niños, de jóvenes, de adultos, de adolescentes.

Y también se entrecruzan sentimientos de alegría y de tristeza. Pero esas tristezas, como la de Facundito (Viviani), seguramente nos llevan a pensar que hay un ángel de la guarda que también va a proteger esta escuela. Y acompañar a la familia en estos sentimientos. Porque el docente tiene justamente esas misiones. El docente es un mediador entre los alumnos, mediador entre los alumnos y los padres, contenedor de tantos sentimientos de padres y alumnos, promotor social, formador en valores cívicos y republicanos, formador en la educación para darles a todos los niños y jóvenes la llave maestra para asegurar la igualdad de oportunidades. La educación es la única herramienta posible y necesaria para asegurar la igualdad y la dignidad en una sociedad de conocimiento y de información como la que vivimos.

Y, cuando le rindo este homenaje a todos los docentes, lo hago con el corazón y lo hago también como nieto e hijo de una docente. Mi abuela Carmen Medina eligió, en el año 1936 -por eso digo que es un año de muchos recuerdos-, en Buenos Aires, la escuela más alejada, más desértica y más humilde de la Patagonia. Y así llegó a Las Cortaderas, cerca de Cutral Co. Fue muchos años maestra en esa escuela. Y hoy una escuela de Cutral Co también lleva su nombre. Por eso es que se entrecruzan muchos sentimientos, muchas emociones.

Y, cuando veo la pasión de Maris (Francisca Bordón) -la pasión y la conducción, porque tiene garra y firmeza para conducir-, les puedo decir que ella dice `ojalá tuviera mil manos´. Pues las tiene, Maris; ustedes y vos tienen mil manos, tienen mil brazos y tienen mil corazones para abrazar a tantos jóvenes, a tantos niños, a tantas personas que pasan por las escuelas y a las cuales ustedes les brindan toda su entrega, para educar a los chicos en valores permanentes. Por eso, vaya este homenaje, este festejo también, al que me sumo, de los cien años.

Y decirles que nosotros estamos pensando seriamente en acompañar a la escuela pública, acompañarla para que este abierta, para que sus aulas estén abiertas, para defenderla, para defender a todos en sus fuentes de trabajo. Son tiempos de crisis muy profunda, hay una crisis internacional que no sabemos que impacto puede tener sobre la realidad de nuestra República, de nuestra provincia. No sabemos como se va a comportar la economía, no sabemos que viene por delante. Por eso pedimos, en estos momentos de crisis y dificultades, mucha seriedad, mucha prudencia, mucha responsabilidad y el mismo compromiso de siempre. Sabemos que hay demandas, sabemos que hay pedidos, sabemos que hay necesidades. Nosotros, como gobierno, este año hicimos un gran esfuerzo para acompañar la inflación y dimos un aumento de sueldos a todos los trabajadores del Estado, quizá mucho más allá de nuestras posibilidades. Hoy nosotros no tenemos el dinero para pagar los aguinaldos, lo estamos buscando, estamos buscando cobrar cuentas, ver cómo podemos recaudar más impuestos o más rentas petroleras o de gas. Se nos pide un aumento salarial por parte de sindicalistas estatales del 45 por ciento, representan 1.200 millones de pesos por año, que en tres años que nos quedan de gobierno son 3.600 millones de pesos, no hay ninguna posibilidad de analizar este aumento.

1.200 millones yo les recordaba ayer representan, por ejemplo, 10 mil viviendas que construidas resolveríamos el problema a tantos habitantes. Representan, por ejemplo, más de 250 escuelas, quiere decir que en dos años podríamos construir tantos edificios escolares como todos los que hoy tiene la provincia. 1.200 millones de pesos representarían un parque eólico de molinos de viento que le daría energía gratis a todos los neuquinos. Entonces yo pido en estos momentos de dificultades, de crisis, de escasez, mucha racionalidad, mucha responsabilidad en los pedidos. Yo se que los dirigentes sindicales convocan a huelgas y a paros, a mí me duele y creo que nos duele a todos los neuquinos, porque el paro y la huelga no es contra el gobernador, quizá sea dirigido al gobernador para doblarle el brazo a ver si inventa el dinero o crea una casa de la moneda para emitir billetes que no la tiene, no esta la plata, no esta el dinero, pero lo más importante es que este paro afecta a los estudiantes, afecta a los trabajadores, afecta a la familia neuquina. Este paro es contra la provincia de Neuquén, no es contra el gobernador. Es la provincia de Neuquén en su conjunto la que tiene que salir de la crisis, hermanados, unidos, sin controversias, sin enfrentamientos estériles, porque se planteo una discusión de lo que no hay. Yo no puedo dar lo que no hay y lo que no existe. Así que pido que en este momento de verdades, todos hablemos con la verdad, y la verdad es la realidad, la realidad que nos toca vivir a todos como argentinos y como neuquinos. Nosotros vamos a cumplir con nuestros compromisos y como dijo Maris, yo soy de esos dirigentes que cuando compromete la palabra quiere cumplirla. Y quiero cumplirla. No me voy a comprometer demagógicamente a dar concesiones que después no pueda cumplir. Prefiero decir que no y ponerme colorado ahora, y no ponerme verde dentro de 30 días cuando no pueda cumplir con los compromisos que se exigen al gobierno y que el gobierno no puede dar, porque un gobernador es elegido por el pueblo para administrar y voy a administrar con la ley de presupuesto, la ley de presupuesto 2008 ya fue aprobada en la legislatura, y esa ley de presupuesto no afecta más gastos porque ya tiene 240 millones de pesos de déficit.

Así que vamos a seguir construyendo la paz, pero la paz se puede construir solamente a partir de la justicia, y a partir de la verdad, por eso vamos a seguir esgrimiendo nuestra verdad. Y nuestra verdad pasa por defender ese compromiso, esa responsabilidad, el esfuerzo, el esfuerzo compartido.

Yo quiero, para terminar estas palabras, decirles que entre otras cosas, hemos acercado esta campana, esta campana que es el símbolo de la escuela, de la escuela que todos hemos conocido y todos queremos, y que cuando se sienta hoy (…) evoquemos a todos los fundadores de escuelas, a todos los pioneros, a todos los maestros, evoquemos también a los actuales maestros y al personal no docente, evoquemos a los alumnos y que cuando sintamos esa campana hagamos de cuenta que estamos escuchando las voces de tantos y tantos maestros que pasaron por estas aulas y que dejaron enseñanzas de verdad, de libertad y de dignidad para construir una sociedad más justa, más libre, y más solidaria. Feliz cumpleaños, feliz aniversario y gracias a todos los que organizaron esta fiesta, un abrazo y todo mi cariño.