Aportes para infraestructura en el santuario de Ceferino

Aportes para infraestructura en el santuario de Ceferino

agosto 19, 2009

Se construirán sanitarios, un parador de ómnibus y un salón de usos múltiples para recibir visitantes, entre otras instalaciones. También se está finalizando la obra de la casa del cuidador. Se afianza interés por el turismo religioso.

Se construirán sanitarios, un parador de ómnibus y un salón de usos múltiples para recibir visitantes.

El subsecretario de Vivienda y Urbanismo, César Herminio Balda, anunció este miércoles que el gobierno nacional realizó un aporte de 596.544 pesos para concluir la infraestructura de la obra ‘cultrum’, ubicada en el paraje San Ignacio y en la cual se depositaron el jueves pasado los restos de Ceferino Namuncurá.

Alrededor del lugar y respetando la tradición de la ramada -lugar donde la gente se instalaba en torno al Rehue (lugar sagrado reservado en la rogativa nguillatún de los pueblos mapuches)-, se dispondrán sanitarios, y un salón de usos múltiples con confitería para recibir visitantes. A esto se suma la casa del cuidador, que cuenta con un avance del 90 por ciento y que se realiza con fondos provinciales.

El aporte nacional fue provisto por la subsecretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda de la Nación, a través del programa de Mejoramiento Habitacional e Infraestructura Básica II (Promhib II), y las obras son ejecutadas por coordinación del subprograma federal de Viviendas Rurales y Aborígenes de la Agencia de Desarrollo Urbano Sustentable (ADUS).

El departamento de Técnica de la Coordinación se encargó de realizar el proyecto y la presentación técnica, que fue elevada al responsable de los programas nacionales, Darío Bardi. El proyecto fue aprobado y fue el mismo Bardi quien le entregó personalmente en mano el convenio firmado por los organismos nacional y provincial al lonco de la comunidad, Celestino Namuncurá.

Balda resaltó que “es un hecho histórico para nuestra provincia” que se hayan podido trasladar los restos de Ceferino Namuncurá a la región, de donde su familia es originaria. Por ello ratificó la importancia de la obra que los cobijará y las nuevas instalaciones “para que quede acorde con lo que va a significar como turismo religioso para la provincia del Neuquén”, que cuenta ya con importantes atractivos en Junín de los Andes.

“Lo de San Ignacio va a ser un complemento muy importante (al Vía Christi de Junín de los Andes) y a partir de ahora la vida de la comunidad con el santuario de Ceferino en el lugar va a cambiar totalmente su aspecto y vida”, afirmó.

Por su parte, la arquitecta María Cristina Búffolo -encargada del suprograma de viviendas aborígenes y rurales- informó que estiman que en un mes se podrá comenzar con la construcción de las obras, que demandarán entre cuatro y cinco meses.

La provincia aportó para obras anexas al monumento

A la vez, el gobierno provincial mediante el decreto Nº 1349, del 7 de agosto pasado, otorgó un aporte no reintegrable de 70 mil pesos a la comunidad mapuche Namuncurá, del paraje San Ignacio, destinado a anexos de la obra. Los fondos fueron otorgados en el marco del programa de asistencia comunitario denominado Fondo de Atención Directa a la Población.

El aporte se invertirá en la ejecución de instalaciones eléctricas, cerramiento perimetral, depósito de agua, hormigones y baldosas del monumento. También servirá para atender  los gastos que demandaron el traslado de los restos del beato desde la localidad bonaerense de Pedro Luro -Fortín Mercedes-, hacia el paraje San Ignacio.

El Fondo de Atención Directa a la Población fue creado recientemente por el gobierno de la provincia frente a la diversidad y multiplicidad de inquietudes y necesidades planteadas por los ciudadanos e instituciones de diferentes localidades y parajes del interior.


El cultrum, en homenaje a Ceferino

Según indicó el arquitecto Alejandro Santana que diseñó el edificio y también las obras artísticas del Vía Christi en Junín de los Andes, se eligió la forma de un cultrum para el monumento porque este elemento musical tiene connotaciones religiosas, es la forma de transmitir un mensaje divino a través de la música.

El edificio tiene ocho metros de diámetro en la base y doce en la parte superior, posee forma circular lo que permitirá a los fieles y visitantes poder desplazarse en su interior alrededor de los restos del beato. Los trabajos en cuestión comenzaron hace más de cuatro años y se realizaron con aportes del gobierno provincial, de la congregación salesiana y de particulares.

Ceferino Namuncurá nació el 26 de agosto de 1886 en Chimpay, provincia de Río Negro, hijo de Manuel Namuncurá cacique de la comunidad del mismo nombre y de Rosario Burgos. Falleció el 11 de noviembre de 1905, en el hospital Fate Bene Fratelli de la isla Tiberina en Italia.

En 2007, Ceferino fue beatificado por el papa Benedicto XVI y la ceremonia oficial se realizó el 11 de noviembre de ese año, en la localidad de Chimpay.

Los restos del hoy beato fueron repatriados en 1924 y depositados en el santuario de Fortín Mercedes, en el colegio salesiano de Pedro Luro, a orillas del río Colorado, lugar en el que estudio de joven. Luego de 85 años, desde el jueves 13 de agosto de 2009, descansan en este paraje ubicado a 60 kilómetros de Junín de los Andes, en el interior de una estructura diseñada especialmente y sobre la piedra que uno de los respetados mayores de la comunidad, usaba para ayudarse a subir ‘a la dignidad’ de su caballo.