Transfirieron áreas marginales a Gas y Petróleo del Neuquén S.A.

Transfirieron áreas marginales a Gas y Petróleo del Neuquén S.A.

abril 13, 2009

Se trata de 54 áreas hidrocarburíferas de mediano y alto riesgo exploratorio. GyP tendrá la facultad de explorar, desarrollar y explotar, en forma individual o asociada con terceros, las reservas cedidas y al mismo tiempo contará con libre acceso a la información geológica y técnica correspondiente.

Áreas marginales

El gobierno decidió la transferencia de 54 áreas hidrocarburíferas secundarias de mediano y alto riesgo exploratorio a favor de Gas y Petróleo del Neuquén S.A. Una importante cantidad de esas áreas pertenecía a Hidrocarburos del Neuquén S.A. y se transfirieron según lo establecido por la ley provincial 2453.

El objetivo del gobierno es revertir la caída de las reservas en gas y petróleo que se registró en la reciente década debido a la sobreexplotación del recurso combinada con la disminución de la actividad exploratoria. Además, se trata de reorganizar la actividad del Estado, con una mejor y más eficiente utilización de los recursos económicos y humanos, de manera de “recuperar el rol protagónico” en materia de hidrocarburos. Con ese propósito, la provincia se propone impulsar programas exploratorios y de desarrollo con el consecuente fomento de inversiones. 

La medida dispuesta por la norma legal tiene vigencia desde el 1 de enero de 2009 y la operación se realizó el 23 de marzo pasado mediante el decreto 0436. La norma modifica varios decretos provinciales de los años 1996, 2003, 2004 y 2006. G&P fue creada a fines del año pasado y es una sociedad vinculada con Hidenesa, que posee el diez (10) por ciento de su capital accionario.

De la totalidad de las áreas reservadas a favor de Hidenesa y que hoy son parte de G&P, la mayoría se encuentra actualmente sin actividad exploratoria ni de producción.

El presidente de G&P, Rubén Etcheverry, detalló que “a través del decreto 436 se transfirieron a la empresa provincial 54 áreas hidrocarburíferas, algunas de las cuales estaban en poder de Hidenesa” y destacó que a partir de ahora “esta firma se dedicará casi exclusivamente a brindar servicios, distribución y transporte de gas; mientras que G&P se dedicará a la producción y exploración de gas y petróleo”.

Agregó que “también hay otras áreas que estaban en manos de la provincia”. En el futuro, las áreas que se transfieran o se reviertan a la provincia -en virtud de la caducidad de los contratos actualmente vigentes- “estarán en manos de G&P para tratar de incrementar la exploración y la búsqueda de nuevas reservas y su posterior explotación”.

Etcheverry sostuvo que “el Estado neuquino pretende un rol protagónico en todo lo que tiene que ver con el futuro de los hidrocarburos de la provincia, tratando de incorporar nuevas reservas, de explorar áreas de bajo, mediano y sobre todo alto riesgo y que -en gran medida- fueron transferidas recientemente a la provincia”.

La meta, según el presidente de G&P, es “revertir esta tendencia en la baja de reservas y en la producción” y describió que “dentro de las 54 áreas transferidas existen algunas que ya están bajo contrato de unión transitoria de empresas y que poseía Hidenesa previamente, y otras que tienen prácticamente muy poco exploración y son de alto riesgo”.

“Todas están ubicadas en la cuenca neuquina”, informó Etcheverry y puntualizó que “las de mayor extensión y riesgo son las ubicadas sobre el borde oeste de la cuenca”. Añadió que la transferencia de una empresa a otra se realiza “sin costo, porque se trata de áreas que necesitan que se invierta para poder buscar gas y petróleo”.

Un total de 54 nuevas áreas para explorar

Etcheverry especificó que se trata de diez áreas que en 2003 y por decreto 1253 se entregaron a Hidenesa SA para su exploración, desarrollo y explotación. Así, La Pendiente, Tres Nidos, Loma del Mojón, Sierras Blancas y la reversión (devolución) de los bloques Catriel Viejo, Fortín de Piedra, El Porvenir, Puesto Bouquet, Bloque CN VIII y Bloque CN X, ahora son parte del activo de G&P.

Otras áreas cedidas a G&P a través del decreto recientemente firmado por el gobernador Jorge Sapag, son las que en 2004 también fueron reservadas a favor de Hidenesa SA: Sierras Blancas, Río Barrancas, Loma Linda, La Rivera, La Vía, Puesto Roa, La Solitaria, La Pendiente, Tres Nidos, Loma del Mojón y Sierra Blanca Sur.

Más tarde, en 2006 y por decreto 224, el Estado volvió a reservar a favor de Hidenesa para su exploración y desarrollo las áreas hidrocarburíferas de China Muerta, Totoral, Cruz de Lorena, Huacalera, Los Álamos, Buta Ranquil, Faldeos del Tromen, Loma Ranqueles, Rincón de la Ceniza, Cortadera, El Corte, Los Toldos, La Tropilla, Yerba Buena, Bajada Colorada, Bajo del Choique, Picún Leufú, Mata Mora y Senillosa. Ahora las transfirió a G&P.

En total, el decreto provincial reserva a favor de G&P del Neuquén, 54 áreas distribuidas en toda la provincia, que se encuentran sin contratos y en poder del Estado neuquino. Ellas son: Aluminé, Cordillera del Viento, El Huecú, Las Lajas, Los Lagos, Aguada del Chañar, Aguada del Puestero, Águila Mora, Barda Colorada, Bajada Colorada, Bajada de Añelo, Bajo del Choique, Borde del Limay, Buta Ranquil (Bloques I y II), Cerro Arena, Cerro Partido, Chapúa Este, China Muerta, Coirón Amargo, Corralera, Cortadera, Cruz de Lorena, Curamhuele, El Corte, El Mollar, Faldeos del Tromen, Huacalera, La Amarga Chica, La Escalonada, La Ribera, La Solitaria, La Tropilla (Bloques I y II), La Vía, Loma del Mojón, Loma Linda, Loma Ranqueles, Los Álamos, Los Toldos (Bloques I, II, III y IV), Los Vértices, Mata Mora, Picún Leufú (Bloques I y II), Puesto Roa, Rincón La Ceniza, Santo Domingo (Bloque I y II), Senillosa, Señal Rocosa, Sierras Blancas, Sierras Blancas Sur, Totoral, Tres Nidos, Yerba Buena, La Pendiente, Río Barrancas y El Umbral.

El decreto establece que Hidenesa conservará la propiedad sobre los derechos de cobro que deriven de los contratos de unión transitoria de empresas correspondientes a las áreas Río Barrancas y la Pendiente, suscriptos con UPF S.A. y SIMA S.A. respectivamente. En consecuencia, los importes serán cobrados por y pertenecerán únicamente a Hidenesa.

Asimismo, se reservarán a favor de G&P las áreas hidrocarburíferas permisionadas o concesionadas por el Poder Ejecutivo nacional o la Provincia que se reviertan en el futuro por caducidad o extinción de los permisos o concesiones vigentes, y aquellas que pudieran crearse en el futuro para su explotación, desarrollo o explotación.

A partir de ahora, G&P tendrá la facultad de explorar, desarrollar y explotar por sí o con la asistencia o asociación de terceros, las reservas cedidas y tendrá al mismo tiempo, libre acceso a la información geológica, técnica y legajos existentes de las áreas mencionadas.

Antecedentes nacionales y provinciales

El artículo 124 de la Constitución Nacional reconoce el dominio originario de los estados provinciales sobre los recursos naturales que se encuentren en su territorio.

Un antecedente válido para la medida adoptada es la ley nacional 26197 en un todo de acuerdo con la Constitución Nacional que fuera reformada en el año 1994, transfiere en forma plena a las provincias, el ejercicio del dominio originario y la administración sobre los yacimientos de hidrocarburos que se encontraran en su territorio.

En consecuencia, las provincias son responsables por la política de administración de sus recursos hidrocarburíferos pero con el deber de fomentar el desarrollo sustentable de sus recursos energéticos.

La ley 2453 asigna al Estado la política hidrocarburífera de priorizar la necesidad de la promoción, desarrollo y ejecución en el territorio provincial de planes destinados a incrementar racionalmente la producción de hidrocarburos líquidos y gaseosos, incluyendo sus derivados.