El viernes se inauguró la nueva guardia de emergencias del hospital Nancy Ferrari de Diby en Picún Leufú. El coordinador del ministerio de Salud, Pablo Jalil, participó del acto junto con el director del hospital, Adrián Rodríguez, y el intendente local, Carlos Castelblanco.
Ante la concreción de la obra, Jalil dijo: “Ahora hay que proyectar con un plan de trabajo para seguir avanzando”, y destacó “el trabajo integrado de todas las áreas gobierno –tanto a nivel provincial como local–, los aportes del municipio para la concreción de la misma y la espera de la comunidad a esta anhelada obra». La inversión del gobierno provincial fue de 5.678.000 pesos.
Castelblanco destacó que la obra se concluyó con mano de obra local y comentó que “a veces miramos para otro lado, cuando en realidad tenemos grandes valores en nuestra localidad”. Se refirió al reconocido médico Fabián Beccan, y dijo que “queremos que esta Guardia lleve su nombre, porque es importante reconocer, ante esta sociedad de valores perdidos, a las personas que apuestan por la vida”.
Por su parte, Rodríguez dijo que dentro del hospital y en la comunidad de Picún Leufú “estamos orgullosos, porque tenemos una guardia de primer nivel”. Agregó que “ahora sí, estamos preparados”.
Antes de concluir, el director del hospital expresó: “Quiero agradecer a los que pensaron esto, porque ha sido algo que surgió desde la comunidad y las autoridades de salud hace un tiempo largo, y hoy nos toca inaugurarlo y ponerlo en funcionamiento”. Mencionó que “estos no son sólo metros cuadrados, hay equipamiento, hay personal que se ha sumado”, y detalló que fueron cubiertos 20 cargos nuevos.
La Guardia de Emergencias cuenta con tres camillas, shock room, una sala con dos camas de observación, habitación para profesionales de salud, posta bronquiolítica, áreas de enfermería, sala de procedimientos, consultorio de enfermería, consultorio médico, sala de espera con baño con accesibilidad, farmacia y área de admisión.
Además, entre el equipamiento que se adquirió, hay un electrocardiógrafo, tres camillas de shock room, dos camas de observación, dos bombas de infusión, dos monitores y una heladera para vacunas. También se incorporó el mobiliario, para garantizar el correcto funcionamiento del espacio.
En relación con la obra, la ejecución se realizó junto al municipio local, por lo que la articulación y el fortalecimiento fueron un eje fundamental para alcanzar el objetivo.