abril 11, 2012
La respuesta a la licitación fue calificada como “exitosa” y se destacó el intenso trabajo de los interesados, así como los mecanismos de transparencia e igualdad de oportunidades para el acceso a las tierras.
Ayer al mediodía, en dependencias del ministerio de Desarrollo Territorial, se conocieron las ofertas para la licitación pública nacional de inversores para la implementación del proyecto de desarrollo multipropósito de las tierras irrigables de Mari Menuco que impulsa el Estado provincial.
En total se presentaron cuatro oferentes, correspondientes a las firmas Naranjo-García; Portanko-Hernández UTE en formación; Bioneuquén UTE; y Gas y Petróleo de Neuquén SA (G&P Nqn).
En el acto licitatorio estuvo presente el ministro de Desarrollo Territorial, Leandro Bertoya; el subsecretario de Tierras, Eduardo Ferraresso; la coordinadora administrativa, Mercedes Aichino y el secretario técnico, Rodolfo Dómina, entre otros funcionarios provinciales y representantes de las empresas interesadas.
Al término de la reunión Bertoya manifestó la satisfacción por las ofertas “que en total son cuatro que incluyen la participación de varias entidades académicas y asociaciones, tales como la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro), Cooperativas Agrarias de Argentina, la Universidad Nacional de Quilmes y la participación en esta compulsa pública de una empresa del Estado como lo es Gas y Petróleo del Neuquén SA, sin ninguna diferencia de trato y cumpliendo con las mismos requisitos que todos los interesados”.
En ese sentido mencionó que “desde el comienzo de las gestiones por llevar a cabo esta licitación pública se buscó ofrecer un marco de transparencia, a través de reglas claras, apertura al diálogo y a expresión de voces disidentes, respuestas conciliatorias con las opiniones críticas y postergaciones de la fecha de apertura de sobres para permitir el debate y el tratamiento de las inquietudes de diversos sectores, incluso de los mismos interesados, que solicitaron más tiempo para poder confeccionar sus ofertas de considerable complejidad.
Bertoya destacó esa transparencia del gobierno “que desde un principio tomó con determinación la postura de establecer claramente que no se realizarán adjudicaciones directas de las tierras, y hoy quedó demostrado que actuó en consecuencia”.
Resaltó la presentación de la empresa G&P por tratarse de “un hecho histórico para Neuquén” ya que por primera vez en la historia de la provincia se elaboró un proyecto integral de producción, financiado con fondos remanentes de la actividad hidrocarburífera con una interesante propuesta por parte del Estado invirtiendo cíclicamente en su futuro.
Señaló además que “las ofertas incluyen a personas físicas o jurídicas que se inscribieron o que estaban inscriptos en el Registro Provincial de Inversores del Copade para desarrollar actividades productivas, un documento indispensable para participar de las licitaciones públicas de tierras. Además -prosiguió- esas propuestas son muy variadas afortunadamente ya que incluyen el desarrollo forrajero, forestal, olivícola, producción de caprinos y una diversidad en la producción que nos generan las mejores expectativas, con alternativas muy interesantes y muy fuertes desde lo institucional, con actores locales, nacionales, empresas del Estado”.
Entre los proyectos integrales se contempla la producción de semillas híbridas para granos finos; biomasa y cultivo energético; captura de carbono y desarrollo forestal; aceites de oliva extra virgen de alta gama; pastoreo para la producción de carne; proyectos de eco agro turismo; un hostel y proyectos de viviendas.
A modo de ejemplo, el ministro dijo que “una de las propuestas incluye a más de cien familias, hermanos horticultores de comunidades bolivianas, quienes durante muchos años estuvieron produciendo hortalizas que se consumen en la región y que ahora son parte de este proyecto”.
Por último explicó que “los proyectos de inversión deben tener por objeto la generación de desarrollo en Neuquén, pero no a cualquier precio, sino con un componente muy fuerte en la evaluación social de los impactos de estas inversiones que son muy importantes, ya que superan ampliamente los 40 millones de dólares, y deben tener en cuenta la preservación del medio ambiente y el agregado de valor en origen de la preservación agraria que allí se genere, junto con los antecedentes de los oferentes. Es decir que se busca asegurar que esas tierras no serán un bien de especulación sino de producción, tal como lo indica la Constitución provincial”.