Realizaron un taller para aeroevacuadores en el Castro Rendón

Con el objetivo de profundizar respecto de la medicina aeronáutica aplicada tanto a la tripulación o a las personas que harán el traslado del paciente, se llevó adelante el viernes un taller para aeroevacuadores, destinado a personal del hospital Castro Rendón. La clase teórica se desarrolló en el Aula 1 de Docencia e Investigación del hospital, mientras que la práctica se hizo en el Aeropuerto Internacional de Neuquén capital.

El aeroevacuador y especialista en Terapia Intensiva de Adultos, Germán Bousemare, explicó que “la idea de hacer el taller fue para tratar algunos temas que los participantes ya conocen y que tienen que ver con la medicina aeronáutica aplicada tanto a la tripulación o a las personas que van a hacer el traslado del paciente”. Entre otros aspectos, mencionó “las variaciones de presión, de concentración de oxígeno, las velocidades, y qué tipo de pacientes pueden ser trasladados”.

La clase teórica se desarrolló en el Aula 1 de Docencia e Investigación del hospital, mientras que la práctica se hizo en el Aeropuerto Internacional de Neuquén capital.

El médico especialista comentó que quienes necesitan trasladar un paciente en calidad de urgencia o de emergencia hacia un centro de mayor complejidad, “piden el traslado aéreo, se evalúa la situación, se evalúa la disponibilidad del avión, las condiciones meteorológicas y se decide o no el traslado”.

Hay pacientes a los que se les puede programar el traslado. “Lo que uno puede hacer en una hora y media en avión, por tierra lo haría en 14 horas. Con el traslado en avión se le saca el estrés al paciente, a los familiares, y se evitan complicaciones”, precisó el médico y agregó que “algunos pacientes que se traen del interior hasta aquí quedan dentro de lo que se llama ventana terapéutica. Algunas patologías tienen un tiempo límite para aplicar determinados tratamientos, y si se viene por tierra y se tarda cinco horas en llegar se pude salir de esa ventana terapéutica. Es imperativo, aunque tal vez no esté tan grave, que se lo traslade en avión”.

Algunos profesionales que asistieron al taller cuentan con credenciales y cursos hechos para realizar la tarea de aeroevacuación. “Si bien hicieron sus capacitaciones, varios de ellos hace bastante tiempo que no hacen vuelos, o no conocen los aviones o no han empezado a volar”, indicó Bousemare y añadió que “es bueno que empiecen a tener la dinámica de los vuelos y conocer el medio ambiente en el que van a trabajar, para poder ir ganando experiencia y horas de vuelo”.

Al referirse a la parte práctica del taller, explicó que “al aeropuerto fuimos para que vean cómo es la camilla, en qué tipo de espacio se trabaja, que es un espacio cerrado, el tema de la habilitación de la energía, el vacío, el oxígeno, todo lo inherente al traslado de un paciente en avión que es bastante distinto a lo que se hace en tierra”.

Del taller participaron profesionales médicos y enfermeros de los servicios de Emergencias Pediátricas y Adultos; de Pediatría; del servicio de Terapia Pediátrica; y Terapia Intensiva e Intermedia de Adultos.

En el eje estratégico N° 5 “Talento Humano de la Red de Salud” del Plan Provincial de Salud 2019-2023, inserto en el Plan Quinquenal 2019-2023, se prevé en los diversos niveles de atención un desarrollo continuo de captación, incorporación, permanencia, motivación y capacitación del personal en general.

Del taller participaron profesionales médicos y enfermeros de los servicios de Emergencias Pediátricas y Adultos; de Pediatría; del servicio de Terapia Pediátrica; y Terapia Intensiva e Intermedia de Adultos.