Neuquén adhirió a la Ley nacional de desarrollo sustentable del sector acuícola

El gobierno provincial adhirió por Ley 3037 a la Ley nacional 27.231 de desarrollo sustentable del sector acuícola. El proyecto había sido presentado por el gobernador Omar Gutiérrez el pasado 1º de marzo y fue aprobado en la Legislatura la semana pasada. Entre los principales aspectos, declara a la actividad de interés público en todas sus especialidades y modalidades productivas.

La norma establece como objetivo el aprovechamiento sustentable de los recursos acuícolas y su conservación, y la protección de los ecosistemas donde se realicen cultivos de organismos acuáticos y su restauración, en el caso de que se produzcan alteraciones en su calidad o estado trófico.

Además, establece al ministerio de Producción y Turismo como autoridad de aplicación y determina que el Poder Ejecutivo provincial deberá implementar una política de fomento y promoción de la actividad acuícola de producción primaria, para lo cual deberá definirse con los sectores vinculados a la cadena de valor la ejecución dinámica de la norma sancionada.

Sus fundamentos

En los fundamentos del proyecto de ley, desde el gobierno provincial se destaca que la política productiva está dirigida a lograr un cambio en la matriz productiva, promoviendo para la industria acuícola un nuevo posicionamiento del sector, en términos cualitativos y cuantitativos, e impulsando un fuerte compromiso del sector en la consolidación de la cadena productiva sectorial, con la producción limpia y la conservación del medio ambiente.

De este modo, con el fin de promover un crecimiento sustentable de la actividad, se construyó la Planta de Procesamiento de Pescados de Piedra del Águila, próxima a inaugurarse, y que está desarrollada con un diseño de avanzada y tecnología de punta.

Por todo esto, se estableció la necesidad de contar con un marco legal regulatorio ágil y actualizado a los efectos del ordenamiento de la actividad.

Antecedentes

A fines de la década de 1970 y gracias a la primera capacitación brindada por la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA) a profesionales gubernamentales, comenzó oficialmente en Neuquén el proceso de fomento y apoyo técnico a la acuicultura.

Esto marcó el inicio de una nueva actividad productiva primaria para la Patagonia Argentina: la acuicultura comercial, en una de sus especialidades, la salmonicultura. Su antecedente fue la piscicultura de introducción de especies para el repoblamiento de ambientes que comenzó a realizarse unas seis décadas antes.