La provincia participa del programa Ciudades para la gente-Herramientas de cambio

El gobierno de la provincia del Neuquén participa en Buenos Aires de la Master class “Ciudades para la gente-Herramientas de Cambio”. Se trata de una iniciativa del Banco Interamericano de Desarrollo, Nación -a través de los ministerios de Transporte; Interior, Obras Públicas y Vivienda; y Relaciones Exteriores y Culto-, el gobierno de la ciudad autónoma de Buenos Aires y la Embajada de Dinamarca en la Argentina que toma como base el trabajo del urbanista danés Jan Gehl.

Profesionales de ese estudio de arquitectura son los encargados de llevar adelante la capacitación intensiva que inició ayer y se extenderá durante tres jornadas. Esta es la primera Master class que realizan fuera de Copenhague, por lo cual se generó gran interés a nivel regional y hay participantes provenientes de diversos países de Sudamérica.

La provincia del Neuquén está representada en esta capacitación por la Secretaría de Planificación y Acción para el Desarrollo-COPADE. Fue convocada a partir del proceso de planificación estratégica que realizó en Añelo aplicando la Iniciativa de Ciudades Emergentes y Sostenibles (ICES). Esta metodología incluyó la participación de los distintos actores en la búsqueda de un objetivo común y permitió la elaboración de un Plan de Acción denominado “Añelo Sostenible”.

La escala humana

En la primera jornada de esta capacitación se mostró parte del trabajo de Gehl alrededor del mundo. El registro de su obra muestra que está enfocado en mejorar y desarrollar la calidad de vida urbana, reorientando el diseño y la planificación de las ciudades hacia los peatones y los ciclistas. Por eso se lo reconoce como un experto en la creación de “ciudades para la gente”, un concepto que introduce en el diseño urbanístico la escala humana por cuanto toma a la persona como unidad de medida en lugar de a los vehículos o el diseño de una plantilla desde el aire.

Eso genera cambios tanto en lo que respecta a la movilidad como a las relaciones interpersonales que se ven favorecidas por esta propuesta de que las personas recuperen espacio y se apropien de la ciudad en donde viven. La idea es simple: cuanto más atractivo, accesible y acorde a las necesidades de la gente sea el espacio público, más personas querrán usarlo. Por eso, Gehl ha promovido la incorporación de las ciencias sociales en las carreras de arquitectura y ha generado un debate interesante sobre qué determina que la gente desee habitar en una ciudad.