Equipo multidisciplinario del hospital Bouquet Roldán brinda asistencia a grupos vulnerables

Equipo multidisciplinario del hospital Bouquet Roldán brinda asistencia a grupos vulnerables

septiembre 9, 2012

Actualmente allí funcionan tres grupos -diabetes, hipertensión y obesidad mórbida- ofreciendo atención integral, educación y brindando un espacio de contención para los pacientes y sus familias.

Uno de los ejes del Plan Estratégico Integral de Promoción del ministerio de Salud de la provincia y de las unidades interdisciplinarias que funcionan en el hospital Bouquet Roldán es coordinar y articular acciones que desarrollen e implementen políticas sanitarias con responsabilidad sobre la salud de la población y grupos vulnerables.

Actualmente hay tres grupos -diabetes, hipertensión y obesidad mórbida- ofreciendo atención integral, educación y brindando un espacio de contención para los pacientes y sus familias.

En el hospital Bouquet Roldán, de la capital neuquina, un grupo interdisciplinario compuesto por enfermeros, médicos, nutricionistas, asistentes sociales, psicólogos, podólogos, psiquiatras y profesores de educación física, realizan prevención, promoción, tratamiento, recuperación y rehabilitación de la salud de la comunidad que solicita su ayuda.

Fabiana Gandola, profesora de Educación Física especializada en rehabilitación cardiovascular, es la coordinadora de los grupos en el módulo de actividad física. La profesional explicó que “comencé a trabajar con las otras unidades de la institución gracias a la solicitud efectuada el año pasado por el actual ministro de Salud, Rubén Butigué, quien hizo el pedido a la subsecretaría de Deportes”.

En la actualidad entre los tres grupos hay más de 35 personas que reciben atención integral gratuita en el hospital Bouquet Roldán. “Estoy muy orgullosa de lo que hacen, porque no sólo es un grupo de personas que viene a hacer gimnasia y se va; sino que ellos saben que es bueno para su salud, que es un entrenamiento y se comprometen”, pronunció la especialista.

Por otro lado, manifestó que uno de los resultados más importantes que esperan es que los pacientes puedan “sociabilizar la actividad”, que puedan trasmitir esos saberes y se transformen en multiplicadores de conocimiento.

Grupos

Dentro del hospital en un principio había dos grupos: diabetes e hipertensión. Luego los profesionales involucrados comenzaron a realizar una evaluación más detallada de las historias clínicas y se hizo una estratificación de riesgo de los pacientes, y surgió la necesidad de conformar un tercer grupo: el de obesidad mórbida.

En este último grupo los pacientes se internan un mes, y luego pasan a la atención ambulatoria. La idea es que en la etapa del ambulatorio se sumen a los otros grupos -diabetes e hipertensión-. La intención es socializarlos ya que “es un grupo que tiende a aislarse” dijo la profesora y explicó que “vamos por el tercer grupo de ambulatorios”.

En relación con el sistema de ejercicio que tienen informó que luego de la estratificación de riesgo, se hace una adaptación para ver en qué condiciones están a nivel de flexibilidad, no tanto del rendimiento físico debido a que son personas que no venían realizando algún tipo de actividad.

Después de la adaptación -dos semanas- se hace una evaluación y en base a los resultados se empieza a entrenar. Ahí ejercitan un mes y a las cinco semanas se los vuelve a evaluar pero con otros ejercicios. Es decir que en cuestión de un año ellos pasaron por distintas etapas y recién ahí empiezan a realizar caminatas.

La clase comienza cuando los integrantes llegan a la sala. Se distribuyen las tareas, algunos toman la presión arterial, otros miden la glucemia y el resto trae los materiales como colchonetas y pesas. Los datos se anotan en un libro de registro y mediciones, ellos junto al profesional analizan si ese día están en condiciones de hacer ejercicio, “es un entrenamiento pedagógico”. Los ejercicios son localizados, intermitentes y de forma personal.

Cuando comienza el buen clima, las actividades se trasladan al patio o a espacios al aire libre. Se empieza a trabajar en la caminata no sólo teniendo en cuenta el gasto calórico, sino el poder manejar la estabilidad y controlar los movimientos de su cuerpo.

Cualquier persona que éste interesada en recibir ayuda e integrarse a los grupos debe acercarse al hospital, en primera instancia a la unidad que les corresponda, allí se lo evalúa y luego se le hace la derivación.