El recupero del IPVU se duplicó en los últimos dos años

El recupero del IPVU se duplicó en los últimos dos años

septiembre 6, 2012

Desde el organismo provincial de vivienda destacaron que fue posible gracias a la agilización de los sistemas de información y de pago. “Empezamos con un promedio de un millón de pesos mensuales y ahora estamos en más de dos millones por mes” señaló su titular, Marcelo Sampablo.

El titular del Instituto Provincial de Vivienda y Urbanismo (IPVU), Marcelo Sampablo, informó que gracias a la agilización de los sistemas de información y de los medios de pago disponibles se logró duplicar en los últimos dos años el recupero de dinero por construcción de viviendas.

“Empezamos con un promedio de un millón de pesos mensuales y entre julio y agosto llegamos a más de dos millones por mes, y se puede sostener”, indicó el funcionario. Además, la Agencia de Desarrollo Urbano Sustentable (ADUS) -que administra créditos otorgados a través de entidades intermedias- también está recaudando un millón de pesos por mes, lo que eleva a 3 millones el recupero mensual de la provincia en concepto de crédito para viviendas.

“El dato importante es que este incremento se produce sin aumentar ni la cuota ni los intereses, que son realmente muy bajos- añadió el director provincial de Regularización y Recupero Financiero, Juan Martín Insúa-. El IPVU por su función social tiene unos intereses que van desde el 0 por ciento al 2,5 por ciento, llegando en algunos casos al 5 por ciento. No hay ninguna entidad financiera en el país que tenga este tipo de tasas y mucho menos los plazos con los que cuenta el IPVU”, aseguró.

Se debe considerar que aquellos que se atrasan en el pago deben sumarle a la cuota intereses por mora, que son del 12 por ciento anual, e intereses punitorios que representan el 30 por ciento del interés por mora, pero se prevé que sean elevados próximamente.

Insúa indicó que algunas de las medidas que se implementaron para lograr este incremento en el recupero fueron la mejora en el proceso de atención al público y en el sistema de información de deuda y cancelación.

“Antes se venía a regularizar la situación y se tardaba en dar la información. Si bien hoy no estamos en el ideal, que sería en el acto, podemos darle al beneficiario 24 o 48 horas su informe. Si la gente venía y no se le decía enseguida cuál es el monto de la deuda y la forma de cancelarla se iba y el dinero lo gastaba en otra cosa”, evaluó.

Agregó que se está trabajando en la diversificación de los medios de pago para incorporar próximamente sistemas como Rapipago, Pago Fácil, tarjetas de débito y de crédito y servicios web para consultas y descarga de facturas.

Actualmente en el territorio provincial existen aproximadamente 50 mil viviendas que fueron construidas por el IPVU y que están en diferentes etapas de su cancelación. “Hay muchas que ya están llegando a los veinte años de entregadas y otras que se están entregando –dijo Insúa-. Se está tirando del carro desde los beneficios de contar con la escritura: queremos que la gente tenga la escritura porque le sirve para acceder al crédito, para entrar al sistema financiero, para dar seguridad para sus hijos. Si la gente sigue pagando la casa sigue siendo del IPVU”.

Recuperar la cultura de pago de la vivienda

Los fondos para construcción de viviendas se constituyen con el Fondo Nacional de la Vivienda (Fonavi), los fondos del Plan Federal de Construcción de Vivienda -que se acredita de acuerdo a los proyectos que se van presentando- y a través del recupero.

Según expresó Marcelo Sampablo, “desde la gestión del gobernador Jorge Sapag se comenzó a hacer un esfuerzo muy grande para recuperar la cultura del pago de la vivienda. Creemos y apostamos fuertemente a que el recupero permita construir viviendas nuevas”.

“El recupero permite que otras personas, que los propios hijos de los adjudicatarios tenga una vivienda. Es injusto no pagar una vivienda, ya que ese dinero irá a la construcción de nuevas viviendas. Si tenemos una casa hipotecada lo mejor es terminar de pagarla y liberarse, y pasar a ser el absoluto propietario para venderla o alquilarla”, recordó.

La ley de de creación del Fonavi establece dos requisitos a cumplir una vez que la persona resulta adjudicataria: ocupar la vivienda y pagarla.

“Cualquiera de los dos requisitos que no se cumplan constituyen causal de desadjudicación. Nosotros estamos readjudicando aproximadamente 200 viviendas por año y la mayoría son por falta de ocupación o de pago; las viviendas no se pueden alquilar. Es necesario ocuparlas porque se supone que la gente que la recibe era su vivienda única y la necesitaba”, dijo.

Sin embargo, aclaró que existen mecanismos para que los beneficiarios queden a resguardo ante circunstancias especiales como traslados por trabajo o enfermedad. En esos casos las viviendas, según la normativa vigente, se pueden alquilar previa autorización del organismo provincial.