enero 23, 2012
Las lluvias que se produjeron en los últimos días provocaron un aumento en la turbidez del agua que se toma desde el río Limay. Desde el organismo informaron que el agua es apta para consumo. Los inconvenientes no afectan a los sectores de la ciudad de Neuquén que se abastecen desde el nuevo sistema Mari Menuco.
El gerente de Producción del Agua del Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS), Mario Ortega, informó que las lluvias que se produjeron en los últimos días “aguas debajo de las represas que hay en el río Limay, han provocado que el agua que viene por el río haya incrementado notablemente su turbidez”.
Destacó que esta situación afecta al sistema de producción de agua potable que tenía hasta hace un año atrás la ciudad de Neuquén, que “se basaba en bombeos ubicados en la costa del río”. Con la puesta en funcionamiento del nuevo sistema “queda solamente un sector abastecido desde esa zona y recibe esta agua turbia”.
Indicó que “los filtros naturales que existen no alcanzan a eliminar en su totalidad. Esto hace que el agua potable que se distribuye en la red tenga un índice de turbidez superior a lo normal y a lo deseado”.
Dijo que el problema principalmente alcanza a los sectores Este y Centro de la ciudad, pero no afecta al resto de Neuquén capital porque se abastece desde el nuevo sistema Mari Menuco.
Ortega aseguró que se incrementaron “fundamentalmente los controles de calidad que rutinariamente se hacen, de manera tal de asegurar la calidad bacteriológica del agua” y agregó que “se está trabajando en varios aspectos para tratar de disminuir al máximo esa turbidez”.
Señaló que los controles “nos permiten ir haciendo un chequeo permanente en cuanto a la dosificación de cloro”, que “es el bactericida más comúnmente usado en el mundo para asegurar la calidad bacteriológica del agua”. Manifestó que “también se controla la turbidez, a los efectos de detectar zonas donde haya más o menos y de esta manera, si corresponde, hacer purgas en la red o hacer el seguimiento”.
El gerente del EPAS instó a la población a cuidar el recurso y explicó que “hemos privilegiado en estos días por lo menos tener agua para el uso sanitario. Tengamos en cuenta que bebemos, ingerimos, alrededor de dos o tres litros por persona por día. El resto lo consumimos en higiene personal, en mantener nuestra casa y en nuestros sanitarios”.
“La idea era mantener la calidad sanitaria, es decir que nuestros baños funcionen, que podamos hacer la limpieza de los utensilios de cocina y el aseo personal”, dijo.
Por último, pidió “las disculpas del caso a la población” y aseguró que desde el organismo se está “haciendo todo lo posible”. “Estas lluvias no son comunes, por lo menos en la intensidad y en el tiempo que se produjeron”, concluyó.