octubre 23, 2009
Este sábado es el Día mundial de lucha contra la poliomielitis, una celebración que en nuestro país coincide con la campaña nacional de vacunación contra esa enfermedad, vigente hasta el próximo 31 de octubre.
Este sábado 24 de octubre se conmemora el Día mundial de lucha contra la poliomielitis, una enfermedad viral que afecta principalmente a niños menores de cinco años. En la Argentina, la celebración coincide con una campaña nacional de vacunación contra esa enfermedad y también contra el sarampión, que comenzó hace tres semanas y concluirá el 31 de octubre.
La subsecretaría de Salud informó que la poliomielitis es una enfermedad viral que se transmite al ingerir alimentos o agua contaminados con el poliovirus. Una vez introducido en el cuerpo, el virus ataca al sistema nervioso y destruye las células nerviosas encargadas del control de los músculos. Una de cada 200 infecciones conduce a una parálisis irreversible e incluso puede provocar la muerte como consecuencia de la inactividad de los músculos respiratorios.
Un esfuerzo mundial para erradicar la enfermedad
En 1988, la Organización Mundial de la Salud (OMS) impulsó una campaña global con el objetivo de erradicar la poliomielitis para el 2000. Tres años después, en 1991, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) detectó el último caso de poliomielitis en América, sin que se haya registrado alguna transmisión autóctona del poliovirus salvaje en este continente desde esa fecha.
Sin embargo, existen vías de reintroducción de la poliomielitis a raíz de la circulación del virus salvaje en otras regiones del mundo y por la circulación de virus atenuados (derivados de la vacuna Sabin). Por eso, en Argentina, en 1987, se comenzó a implementar el Programa de vigilancia de las parálisis fláccidas agudas (PFA), que consiste en estudiar y descartar todo caso probable de poliomielitis así como también casos de parálisis asociados a la vacuna Sabin.
Los virus atenuados de la Sabin, que continúan circulando en el ambiente, son capaces de generar en las personas inmunidad pero no ocasionan la enfermedad. Sin embargo, son posibles mutaciones e infecciones en personas susceptibles, es decir, no vacunadas. Por eso, las bajas coberturas son desfavorables para consolidar la erradicación de la enfermedad.
Desde la OMS sostienen que, en 2008, la poliomielitis sólo seguía siendo endémica en cuatro países: Afganistán, India, Nigeria y Pakistán. No obstante, desde dicho organismo advirtieron que, mientras haya un solo niño infectado, todos los menores del mundo corren el riesgo de contraer la enfermedad. Tal es así que, entre 2003 y 2005, hubo 25 países antes libres de la enfermedad que volvieron a presentar casos de infección debido a la importación del virus.
Alerta en Argentina
ste año, en Argentina, a raíz de un caso de una poliomielitis post vacunación en un niño de San Luis, el ministerio de Salud de la Nación decidió hacer una campaña dirigida a todos los menores de cinco años, que comenzó el 28 de septiembre pasado y se extenderá hasta el 31 de octubre. Para inmunizar a los pequeños y ayudar a erradicar la enfermedad, los padres deben cercarse a los vacunatorios públicos o privados antes del fin de la campaña.
La poliomielitis no tiene cura, sólo se puede prevenir. La vacuna administrada de forma repetida confiere a los niños una protección de por vida. Además, como la vacunación es un derecho, la aplicación de estas dosis adicionales es gratuita y obligatoria.
Según el calendario nacional de vacunación, la Sabin se aplica habitualmente en cuatro dosis: a los 2, 4, 6 y 18 meses de edad; adicionándose un refuerzo en el momento del ingreso escolar.