Discurso del gobernador Jorge Sapag en el acto por el Día de la Independencia, en Villa La Angostura. 9 de julio de 2011.

(…) doctor Ricardo Alonso, su señora esposa, señores senadores y diputados nacionales, provinciales, concejales, vocal del Tribunal Superior de Justicia, integrantes del Centro de Veteranos de Malvinas, Sexta Brigada de Montaña, jefe del Escuadrón 23 de San Martín de los Andes, señor jefe de Prefectura (Naval Argentina) de (San Carlos de) Bariloche, comandante del Centro de Operaciones de Emergencia; señor jefe de Policía de la provincia, señor presidente e integrantes de la Asociación de Bomberos Voluntarios de Villa La Angostura, señor director de Protección Civil del ministerio del Interior, señor subintendente del Parque Nacional Nahuel Huapi, directivos y auxiliares de distintas escuelas, representantes e integrantes de instituciones, entes y organismos nacionales, provinciales y municipales, efectivos del Ejército, Gendarmería, Prefectura y Policía de la provincia que se encuentran aquí presentes.Quiero en este día tan importante, tan histórico, de conmemoración de un aniversario más de la Independencia de nuestra República, hablar desde esta tierra patagónica, neuquina, andina y cordillerana, de esta tierra neuquina y patagónica hoy vestida de celeste y blanco para celebrar esta fecha de la Independencia, de la libertad. Y recordar con todos ustedes a hombres y mujeres que dieron su vida, su libertad, su integridad física; se sacrificaron y lo dieron todo de sí, hasta la tranquilidad de sus vidas personales y familiares, en pos de una causa común.

En el Acta de Declaración de la Independencia de 1816 quedaron grabadas palabras históricas, como las que decían que acá había un pueblo que clamaba al cielo de todo el territorio de las provincias argentinas y clamaba al cielo para hacerle saber al mundo, a todos los hombres y mujeres de buena voluntad, para hacerles saber a todas las naciones libres, que había un pueblo decidido y con voluntad de libertad, de independencia y de justicia.

Esta conmemoración nos lleva a entender claramente que hoy tenemos una decisión histórica de aquel momento de generar una nación libre y que nazca a la faz de la tierra una nueva y gloriosa nación. En segundo lugar, una decisión inquebrantable de un pueblo que tenía que coronar los hechos de Mayo con la declaración de la Independencia como estaba pidiendo San Martín desde los campos de batalla. Y, al mismo tiempo, la conciencia y el testimonio de las generaciones futuras y venideras, y de la nuestra misma, de saber que la independencia, la libertad y la justicia son una construcción permanente, son una construcción de la democracia, que hace que nosotros tengamos la responsabilidad de ese testimonio para seguir construyendo lo que los fundadores de la nacionalidad dejaron.

Y al mismo tiempo, en este marco de patriotismo, de sanos sentimientos que nacen de lo más profundo del corazón y del espíritu, estar en Villa La Angostura, al lado de un pueblo que está de pie, con una vocación también inquebrantable de lucha, de trabajo, de salir adelante frente a la adversidad de la naturaleza. Con orgullo, sumarme a las palabras de Ricardo, el intendente de la localidad, y decirles que reconozco en el municipio, en el intendente, en los concejales, en el equipo de trabajo, en el comando de incidentes, en Defensa Civil, en los voluntarios, aquellos hombres que se pusieron la mochila de esta responsabilidad sobre las espaldas y convocaron a todo el pueblo de Villa La Angostura, que no dudó un solo instante en ponerse de pie para luchar, para salir adelante.

Quiero hacer el reconocimiento a todos los que colaboraron en esta tarea: al Ejército Argentino, que con su consabida organización y disciplina permitió realizar tareas impostergables; a Gendarmería, por la misma razón; a Prefectura, también por el valor y el coraje de sus hombres yendo a asistir a nuestros habitantes en las costas y en las islas; también a todo el personal del Ente Provincial de Energía del Neuquén, que luchó denodadamente para restablecer el servicio eléctrico, muchas veces con lágrimas en los ojos, pero seguramente con el corazón abierto y decididos para concluir esta tarea; al personal del EPAS (Ente Provincial de Agua y Saneamiento), por restablecer el servicio del agua; a Parques Nacionales, a todos sus integrantes, por el sacrificio y el empeño para llegar a cada habitante y a cada rincón.

Seguramente me voy a estar olvidando de muchos de los que colaboraron en esta tarea. A la gente de Defensa Civil; a la Policía de la provincia, a los cadetes y voluntarios, hoy representados por 40 mujeres aspirantes que están trabajando hoy en Villa La Angostura en las tareas de remediación y limpieza de cada una de las viviendas, de las escuelas, el hospital y las calles. En esta tarea de reconocimiento, quiero hacerlo también extensivo a Corfone (Corporación Forestal Neuquina), a Vialidad Nacional, a Vialidad Provincial, a municipios vecinos, a empresas que han aportado sus máquinas en forma desinteresada.

Quiero decir que, como decía Ricardo, es una responsabilidad histórica y es un desafío donde tenemos que dejar de lado banderías partidarias, donde tenemos que dejar de lado todo aquello que no represente grandeza, porque hay acá un pueblo que está luchando, con fe en sí mismo, con fe en sus fuerzas, pero también con fe en Dios y con fe en que el gobierno provincial y el gobierno nacional van a estar firmes al lado del pueblo para sacar adelante a Villa La Angostura de esta coyuntura y a toda la región: a Villa Traful, a Meliquina. Y los efectos que ha tenido en toda la región, San Martín de los Andes, Junín de los Andes, Meliquina, en Brazo Rincón, a cada uno de los pobladores.

Vamos a seguir trabajando en las tareas de asistencia directa, tanto a los pobladores como en la producción, como a los habitantes de Villa La Angostura. Vamos a seguir trabajando en tarea de viviendas, de techos. Trabajando en todo lo que es limpieza. Hemos constituido una unidad ejecutora que va a destinar recursos que van a hacer que en los próximos seis meses Villa La Angostura conozca una tarea intensa, enorme, bajo la dirección y coordinación de profesionales que hemos ido a buscar. Hay entre nosotros hoy y quiero agradecer la presencia de consultores internacionales, vulcanólogos, ingenieros en remediación ambiental, coordinadores y especialistas que están haciendo un informe preliminar para ir a hacer los trabajos en cada uno de los lugares de Villa La Angostura y de la región en que tengamos que intervenir.

Vamos a invertir 30 millones de pesos para recuperar bahías, playas, puertos, paseos, miradores, senderos, todo lo que tiene que ver con la recuperación de nuestro destino turístico y de nuestra seguridad en las aguas. Vamos a ir recuperar el pueblo de Villa La Angostura. Vamos a recuperar el verde y el azul de nuestros lagos. Vamos a hacer que el gris de esta arena que nos envió el volcán ceda y retroceda. Es un trabajo que va a llevar mucho tiempo, pero que va a tener en nosotros la firme e inquebrantable voluntad de vencer esta adversidad de la naturaleza.

Nos ponen a prueba y ponen a prueba también la herencia de nuestros pioneros. Nuestros pioneros llegaron a estas tierras patagónicas con el espíritu de lucha, de trabajo, de coraje y de sacrificio. Con cientos de privaciones, incomunicados, solos, en estas tremendas lejanías, en estas tremendas soledades. Pero esa estirpe de pioneros ha sido heredada por este pueblo neuquino, por estas generaciones presentes que saben que tienen que trabajar mucho para restablecer los colores y el destino turístico. Desde el primer día se hizo. Aún hoy, con el volcán todavía en actividad, hay un pueblo que está de pie y es un ejemplo. Esta conducta ejemplar del pueblo de Villa La Angostura tiene que hacer eco en cada uno de los gobiernos, tanto provincial como nacional, para llevar adelante todas estas tareas.

Vamos a invertir más de 150 millones de pesos en la red eléctrica de Villa La Angostura, trayéndola por Pilcaniyeu y resolviendo también problemas de la vecina provincia de Río Negro. Esto lo vamos a hacer con fondos provinciales. Vamos también a colocar redes eléctricas subterráneas en distintos lugares de Villa La Angostura para no tener que sufrir los efectos de las cenizas y de los cortocircuitos.

Hemos comprado grupos electrógenos. Hoy la unidad ejecutora está trabajando con 21 equipos, entre viales y autobombas. Vamos a incorporar esta semana otros 8 equipos más. Vamos a llegar a 29 equipos. Para empezar, esto es para empezar a hablar. Les puedo asegurar que la unidad ejecutora, con el trabajo de responsabilidad social empresaria de muchas empresas, va a encontrar en Villa La Angostura muchas máquinas trabajando, acompañando el esfuerzo de los brazos, de las espaldas y de los hombros de hombres y mujeres.

Yo quiero, simplemente y siendo breve, porque tendría muchas cosas para transmitirles de novedades que tenemos que hacer en Villa La Angostura, decirles que estamos trabajando con el ministerio de Economía de la Nación en 50 millones de dólares de crédito que van a venir a atender esta contingencia. Nos van a encontrar como provincia en los próximos meses trabajando intensamente al lado de ustedes como pueblo, al lado del municipio, al lado tuyo Ricardo como intendente y de todo tu equipo.

Vamos a trabajar denodadamente. Vamos a estar viniendo en forma permanente. Yo he venido muchas veces a Villa la Angostura y me van a tener muchas veces más acá acompañándolos, como dice Ricardo, no solamente con medidas económicas, no solamente con medidas de recomposición de nuestras rutas, de nuestras banquinas, de nuestros paisajes, de nuestros lagos, de nuestras casas, de nuestro hospital, de nuestras escuelas, sino fundamentalmente con el abrazo fraterno, con el cariño sincero, con el corazón abierto del apoyo que necesita todo un pueblo en lo afectivo para salir adelante. Un pueblo que tiene fe, fe en sí mismo y fe en Dios, pero que necesita ese afecto y ese cariño.

Y aquí hemos venido a dar ese cariño. No va a haber lluvia, no va a haber nieve, no va a haber viento, no va a haber arena que nos puedan parar en esta tarea. Le hemos declarado la guerra a la arena y se la vamos a ganar. Se lo puedo asegurar, se lo puedo asegurar, querido pueblo de Villa La Angostura.

Así como en el Acta de la Declaración de la Independencia hombres y mujeres que le dieron origen a nuestra nacionalidad dijeron que clamaban al cielo pidiendo a todos los hombres, a todas las naciones, a todos lo que quisieran escuchar que nuestra causa era justa por la independencia. Y aquí, desde Villa La Angostura, también pedimos y clamamos al cielo que la justicia de nuestra causa para restablecer nuestro destino turístico, para recomponer la belleza de Villa La Angostura, para hacer de este jardín de la Patagonia el jardín más lindo de la Patagonia, aún más lindo de lo que era antes que estas cenizas.

Este es el compromiso y el grito que clamamos nosotros hoy al cielo para decirles a todos los vientos, a la provincia del Neuquén y a la República Argentina que nos van a encontrar de pie como estuvimos desde el primer día. ¡Angostura podemos! Ese es el grito de guerra y ese es el programa para trabajar con todos ustedes. Que Dios nos dé sabiduría, fortaleza y trabajo para sacar a Villa La Angostura adelante y de esta manera sentirnos orgullosos y decir: tarea cumplida. Que viva la patria y que viva Villa La Angostura y viva Neuquén.