Comenzaron a cosechar maíz en Añelo

Comenzaron a cosechar maíz en Añelo

marzo 26, 2012

Las primeras tareas abarcaron cuatro hectáreas, donde se realizó un cortapicado y posterior ensilado. En la zona hay un grupo de productores que comenzaron a incursionar en este cultivo, asesorados por técnicos de la provincia.

La semana pasada se inició la cosecha de maíz en la zona de Añelo, donde un grupo de productores comenzó a diversificar su producción en el último tiempo, incursionando en este cultivo. La iniciativa cuenta con el asesoramiento técnico del ministerio de Desarrollo Territorial, a través del Centro PyME-Adeneu.

De la actividad, que se realizó en el campo del productor Pablo Vela, participaron productores y técnicos, quienes presenciaron las tareas de cosecha en cuatro hectáreas mediante el sistema de cortapicado, que consiste en el corte de la planta entera, que es triturada y luego ensilada.

La otra alternativa es la cosecha del grano, que se hará en el mes de mayo.

En algunos casos los productores cosecharán con los dos sistemas, en tanto que en otros directamente realizarán la recolección del grano.

La coordinadora del Programa Ganadero del Centro PyME-Adeneu, Mariana Hafford, explicó que “es la primera vez que este productor realiza el cortapicado en su establecimiento. Esto se hace en el estado de grano pastoso, y en vez de cosechar maíz como grano se hace de esta manera para luego ensilarlo y conservarlo con el fin de usarlo como alimento para los animales”.

En relación al procedimiento de cosecha, Hafford detalló que “una vez que se realiza el cortapicado se traslada en un camión desde el lote a un sector ya preparado donde se lo va compactando en capas y en este caso se utilizaron rollos de fardos como contención. Luego se coloca encima una protección, una manta de polietileno tratada contra rayos ultravioletas que protege al cultivo del clima para mantenerlo en condiciones”.

Este proceso de ensilado permite almacenar el forraje hasta un año, de manera de poder utilizarlo cuando el campo tiene necesidad de contar con alimento para los animales.

El Centro PyME-Adeneu brinda asistencia técnica permanente a los productores y además los pone en contacto con otras instituciones que trabajan en la temática. El seguimiento del trabajo a campo de este grupo está a cargo de Santiago Köhler.

Además se les ha provisto, mediante alquiler, las maquinarias necesarias para la siembra y otras actividades en el campo, se colaboró en el financiamiento del flete para trasladar la máquina que realiza el cortapicado y con la compra de la manta cobertora.

Hafford destacó el trabajo conjunto de distintos sectores en esta actividad, con la participación del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y de contratistas de la zona. En este sentido, mencionó a Hernán Cancio, del INTA Alto Valle, que previamente a la cosecha brindó una charla sobre verdeos de verano y maíz, y a Francisco Pili, quien estuvo a cargo del asesoramiento y provisión de las maquinarias necesarias para el cortapicado.

Experiencia

El productor Pablo Vela explicó que “este campo es básicamente forestal. Hace unos años comenzamos a hacer un silvopastoreo y hemos ido incrementando los lotes de animales para el engorde, lo que nos llevó a la necesidad de aumentar la oferta de forraje”.

Tomando la experiencia de cultivo de maíz realizada el año pasado por su hermano Gilberto Vela, “este año, impulsados por ese buen antecedente, decidimos hacer una siembra de diez hectáreas de maíz para consumo propio. La idea fue sembrar un híbrido con destino a cortapicado para ensilarlo, con la posibilidad de usar otra parte, que serán seis hectáreas, para cosecha de grano”, indicó.

Vela añadió también que “teniendo en cuenta la cantidad de animales que tenemos y si sumamos dos hectáreas más con alfalfa, estimamos que el alimento nos va a permitir pasar todo el invierno”.

Se estima que en el último año la superficie plantada en la zona de Añelo se incrementó de 30 a unas 150 hectáreas, de la mano de este grupo de productores.

En esa superficie se utilizó una combinación de métodos de siembra convencional y directa. En la mayoría de los casos se utilizó el riego gravitacional, aunque hay algunas experiencias de sistemas mecanizados.

Antecedentes

Años atrás la provincia planificó y contempló en la Ley 2669 (Plan Productivo Provincial) el fomento a la producción de alimento local para ganadería, al detectarse como uno de los “cuellos de botella” de esta actividad.

En este sentido, desde el ministerio de Desarrollo Territorial se han llevado a cabo una serie de acciones, como capacitaciones y asesoramiento sobre todo lo que implica la producción de maíz (aspectos técnicos, proveedores, maquinarias).

Estas iniciativas están contempladas además dentro del Programa de Desarrollo Ganadero del Centro PyME-Adeneu, que tiene, dentro de una línea de acción denominada “Más Producción Primaria” a la promoción de la siembra de pasturas, el enmallinamiento, la fertilización y el riego para la producción de forraje en pequeños valles, todo con el fin de incrementar la generación de alimentos para el ganado.